Aprendiendo a Seducir by Honda_Tohoru

 Hola. Soy Natalia y como podrán ver... me enamore de un idiota, estúpido, payaso y encantador chico. Aquel que me hace reír con cada palabra y llorar al no darse cuenta de lo que esta pasando. Nunca pensé que esto iba a pasar, cuando lo conocí en realidad pensé que jamas podría un ser llegar a sentir algo por un hombre como el. Esta realmente desquiciado, lo digo en serio!

Hacen 2 años que lo conocí y estoy inevitable e irrevocablemente enamorada de el. El no lo sabe pues es tan tonto para no darse cuenta. Pensé que vivíria internada en la Friend Zone hasta que apareció aquel chico... El que me ayudaría a convertirme en una bomba sexy (o al menos eso decía el) y hacer a Matias darse cuenta de que podía conquistar a cualquier chico que desee, incluso a el.

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Subí las escaleras. La casa estaba en total caos y desorden. El olor a cigarrillos estaba impregnado en las paredes, almohadones, sillones, pinturas, Diablos! Incluso mi ropa olía a fumador mezclado con borracho. Cervezas y tragos derramados por el piso le daban ese olor peculiar a mi casa. Me pregunte donde estaban mis amigos, pues no veía a ninguno desde hace rato.

El efecto del par de tragos de Vodka que me tome me estaban pasando factura. Si, definitivamente subir las escaleras se estaba tomando como un desafío. Caminar así debería ser tomado en cuenta como deporte para las próximas Olimpiadas.

Me dirigía a mi cuarto, no pensaba hacer el ridículo en mi propia casa, que los demás aparecieran en fotos vergonzosas en Facebook el día siguiente, no yo. Antes de llegar a mi habitacion escuche sonidos que inmediatamente llamaron mi atención y me alarmaban.

Gemidos. Gemidos femeninos invadían el espacio de mi habitación. ¿Quien mierda se había atrevido a meterse a mi cama a tener sexo?

Levante una mano hacia la cerradura en el momento en que mis respuestas fueron respondidas.

Oh! Si, Matii anda... mas mas...por favor.,.

Me congele. Pero aquello no era todo lo que mis oídos debían escuchar.

Ahhh! Ahí sigue por favor! Mas!.. Oh por Dios! Matias me vengo...

Maldita Perra!! Como te atreves a...

Ah!  Melissa estas tan estrecha, me encantas.

La voz masculina de mi amigo inundo mi habitación justo mientras maldecía a aquella mujer.

La punzada de dolor no tardo en hacerse presente en mi pecho, oprimiendo mi corazón y apuñalando a cada uno de los sentimientos albergados en mi corazón. Yo lo sabia, sabia lo que el era y lo que hacia, esto no debía sorprenderme.

No podía evitarlo, las lágrimas se escapaban de mis ojos y recorrían sin permiso alguno mis ojos. Aquellas pequeñas gotas saladas me delataban a kilómetros. Pero que podía hacer? Me dolía, porque carajos tuvo que meterse en mi cuarto?

Me quede alli, estatica sin poder moverme mientras las lagrimas hacian su camino en mis mejillas y algunas morian en mis labios.

Cuanto tiempo habia pasado?? Un sonido me hizo dar cuenta que no estaba sola.

-Nati... nena estas bien?

Oh no, esa voz! Esa voz la reconocería en cualquier momento.

No me di cuenta en que momento Matias estaba frente a mi al lado de la mujer que supongo es Melissa.

Tomados de la mano.

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-Mira si lo quieres contigo tienes que atraerlo. Como esperas hacerlo con esa ropa? Pareces varon.

Obri la boca apunto de lanzar una lanza de maldiciones.

-Idiota claro que no! Que quieres? Que use vikini a diario?

-Y definitivamente tienes que usar maquillaje. De casualidad sabes lo que es perfume?

Idiota!

Si, era un idiota. Pero me volveria una Diosa en el arte de la seduccion si o si, y el iba a ayudarme.

Hola chicos :D Realmente contares como se me ocurrio la historia pues no lo se. Tenia varios dias con la idea de escribir pero no podia decidirme bien.

Mientas veia una pelicula depronto me llego! Magicamente toda la idea se desarrollo en mi mente. Fue como un flash y un golpe de suerte.

Espero que disfruten de esta historia, pues mi unica intencion e entretenerlos :D No sera corta, tampo es que sera muuuuuuy larga pero si tendra mas de 10 o 15 capitulos.

Hola chicos :D Me alegra muchisimo que esten aca y le hayan dado una oportunidad a la historia.

Este capitulo mostrara un poco de las personalidad de los chicos.

Realmente espero que disfruten la historia.

Generalmente no suelo usar palabras de mi pais porque me ha pasado que leo historias que no entiendo por sus palabras realmente propias de paises y desconocidas para mi. Asi que todo esta en palabras del vocablo del español. Si se me pasa alguna palabra por favor disculpen, es la costumbre pero evitare hacerlo.

Bueno, no los distraigo mas... a Leer!

Saludos desde Venezuela :D

Suelo poner una cita al final de cada capitulo. Espero sea de su agrado.

 La Chica Nueva

Eran las 2 de la madrugada y el sueño no llegaba! No tenia idea que pasaba con el sueño pero lo que era seguro es que estaba decidido a abandonarme permanentemente.

Ese día había visto a Matias fijar su vista en su nuevo objetivo. Gabriela, la chica nueva del instituto. El prospecto de mujer en la que el se fijaba. Cabello castaño largo y ondeado, piel blanca, ojos marrones, labios gruesos, senos grandes, cintura delgada... En fin! El tipo de mujer que alborota la testosterona de los hombres. Sobretodo si se trata de adolescentes.

-Uff! Como me gusta esa niña. Definitivamente va a terminar conmigo, seguro!. -ijo el intento de semental sentándose donde estábamos reunidos pasando el tiempo libre entre clases.

-Ni me lo digas! Que buena esta esa tonta! -respondió Marcos, un chico que estudiaba con nosotros. Bastante agradable, confiable y guapo.

-Podrían dejar de pensar en senos por un segundo? Aburren- dije hastiada.

-Pues tu deberías pensar en conquistar a algún chico, porque bastante falta que te hace tener algún novio -dijo Matias entre burlas.

-A ver... empecemos con lo fundamental, te gusta alguien?

Su vista me traspaso y me contuve antes de que se me saliera decirle “Si, me gustas tu”

-No, nadie -dije intentando aparentar fastidio.

Sentí un par de miradas fijas sobre mi como diciendo “cobarde, cobarde, cobarde! Confiésalo! Vamos dile que te gusta”

-Ya sabes que hay unos tipos que les gustas, creo que están en el aula B o C -insistió.

Me reí con amargura al ver su intento por meterme a alguien entre las piernas.

-Ya déjala Mati, sabes que los rechazara como siempre -intervino Maria José, de cariño le decíamos Marijo.

Ella era la única persona a la que le había confesado que sentía algo por Matias. Aunque cuando se lo dije se rompió en carcajadas diciéndome que eso era algo demasiado obvio y que solo el idiota de Matias no se había dado cuenta aun. Diablos! De verdad se me notaba tanto?

-La falta de sexo te pondrá de mal humor, me sorprendes que no seas histérica. Sin embargo cuando lo estés, seremos nosotros quienes soportaremos tu inexistente vida sexual -insistió mi amigo

-Ya podrías callarte? Pareces mas preocupado por mi vida sexual que por la tuya- respondí aburrida.

Siempre me recordaba lo vacía que estaba mi cama, y no perdía oportunidad en recordaba lo bien que se la pasaba el los viernes en la noche. Puto de mierda!

-Vámonos ya, empezó la clase.

Fernando era alto y estaba en la Orquesta, tocaba guitarra como un Dios y era el que mas seguía las normas de todos nosotros. Comenzamos todos con paso animado hasta el salón y tomamos nuestros puestos, todos cercanos. El profesor entro junto a una chica y maldije mi suerte.

-Jóvenes ellas sera su nueva compañera, Gabriela Suarez. Espero que sepan recibirla.

Le ubicaron en una silla y mi sangre bombeo a mi cuerpo con fuerza, ira y celos al ver que el único puesto estaba al lado de Matias, mi Matias. Pff! Maldita suerte.

-Hola, soy Matias, como estas?

Oi su voz melosa y esa sonrisa que pone cuando entra en modo conquistador.

-Hola Matias, soy Gabriela pero puedes decirme Gabi -le sonrío cínicamente- todos me han tratado muy bien. Es un lugar muy bonito.

Claro! Vas mostrando el sostén! Como no van a tratarte de maravillas? Pensé con ironía.

La clase duro una eternidad, o tal ves era el hecho que me enloquecía ver a esa pechugona sonreirle cínicamente a mi amigo. Nos reunimos todos en la puerta al final. La chica nueva ya había salido acompañada de un par de chicos que estaban en la misma misión de Matias. Sexo fácil.

-Bueno que tal camarada? -pregunto Marcos

-Ya di el primer paso, esa cae seguro -respondió esbozando una sonrisa arrogante

-Vamos a ver cual se la gana primero.

-Ustedes son unos cerdos. Las mujeres no somos fichas de apuestas sabían?

-Pues para eso deben darse a respetar -interrumpió Matias- no es mi culpa que tengan un cartel en la frente que diga “Soy accesible”

-Pf! Idiota.

No se como puede gustarme semejante idiota.

-Bueno señoritas, yo me voy, tengo una fiesta esta noche -anuncio mi amigo despidiéndose.

-Intenta no terminar en la cárcel esta ves quieres?

-Hey! Ya les dije que yo no empecé la pelea -se defendió -lo único que hice fue defender a una chica que estaba peleando con un idiota.

-Si claro -dijimos al unisono.

Y todos nos fuimos a nuestras respectivas casas.

Yo vivía en una casa de 2 pisos que mis padres me habían rentado para que me independizara y tuviera libertad. El inicio de la universidad les hizo darse cuenta que ya no estaba tan pequeña como ellos pensaban. Vivía sola aunque mis amigos pasaban mucho mas tiempo aquí que en su propias casas.

Mi pequeña morada era la escogida siempre para fiestas de fin de semana. Llegue y me metí rápido al baño, de alguna manera estaba exhausta y ansiosa de llegar a mi cama. Había quedado con mis amigos en que nos reuniríamos aquí en casa al día siguiente para ver unas películas y pasar la tarde.

Aterrice en mi cama como un peso muerto y me caí rendida a los brazos de Morfeo.

Peeeeeeero, nada es perfecto. y no fui capaz de estar abrazada a la inconciencia por mucho tiempo.

Golpeteos suaves. Un sonido extraño me fue sacando de mi sueño profundo, aquel débil sonido se repetía y se repetía una y otra ves. Algo extraño arañaba en cristal de mi ventana.

Me levante asustada y temerosa de lo que podría estar ocasionando este extraño sonido.

-Naatiii... Natii... Sal!

Matt... Matias??

Parpadee un par de veces pensando que aun estaba dormida y aquel chico volvía a atormentar mi sueño.

-Joder Natalia Ábreme!

Matias?. Camine hacia la ventana y la abrí. Allí estaba el. Frente a mi casa apollandose de un árbol grueso

-Que haces aquí Matias? -mi voz pastosa se abrió paso por mi garganta aun adormecida.

-Perdí las llaves de mi casa, ábreme.

Me dirigí hacia la puerta de mi habitación y baje las escaleras. Llegue hasta la puerta principal y ahí estaba el. Con ojos rojos, sonriendo como tonto y tambaleándose.

Sip, estaba ebrio. Hasta la medula.

-Hola preciosa, como estas? -saludo ensanchando su sonrisa.

-Bien, ya sabes que no puedes tomar tanto Matias -lo regañe.

-No seas mala si? Esta es la ultima ves que pasa, lo prometo -puso ojitos de cordero a medio morir.

Y hizo algo que no me esperaba. Se lanzo a mis brazos y se dedico a susurrarme cosas que en su mayoría no entendí.

De pronto y sin aviso comenzó a recorrer la piel desnuda de mis brazos y espalda y un escalofrío me recorrió entera.

-Debes conseguirte novio en serio, estas preciosa -susurro en mi oído.

Esta ebrio, es tu amigo, y solo te ve como una amiga. Esta ebrio, es tu amigo... No te ilusiones por favor! Me repetí ante este pequeño gesto de su parte. Era increíble lo que ocasionaba en mi. Como no te das cuenta Matias?

Se alejo al segundo siguiente y me hizo falta aquel calor que me proporcionaba su cuero y el olor de su colonia. Hay mi Dios... que cruel eres.

Mire mi cuerpo y de inmediato me di cuenta que estaba en ropa para dormir. Con un top diminuto y un short que ocupa tanta tela como la parte de los senos de un traje de baño. Oh, que vergüenza. Matias subió las escaleras en una acrobática demostración de equilibrio considerando lo ebrio que estaba. Cerré la puerta y lo seguí. No lo vi en las demás habitaciones, hasta que entre a la mía y allí estaba. Tirado en la cama boca abajo con los ojos cerrados.

Sonreí al verlo de esa forma. Aquel chico que parecía idiota a la vista de los demás pero que era tierno y dulce. Como Matias? Como hiciste para meterme en semejante lío? Como pude quedar hechizada por ti?

Porque tuve que enamorarme de mi mejor amigo?

Y? Les gusto el primer capitulo?

Espero haya despertado su curiosidad y sigan leyendo la historia.

Espero cumplir con sus espectativas.

Subire pronto el capitulo nuevo y actualizare las demas historias, estoy algo atrasada en eso u.u

 Cita

"Dicen que el tiempo cura las heridas, no estoy de acuerdo, las heridas perduran. Con el tiempo la mente, para proteger su cordura, las cubre con cicatrices y el dolor se atenúa, pero nunca desaparecen”.

Hola chicas y chicos.

Estaba en el trabajo de mi mama y le robe un rato el pc jujujujuju

aca les traigo este segundo capitulo de la historia. Lo acabo de hacer, le falta edicion de errores y todo eso pero siempre  me apuro y lo subo de una ves jeje

Espero sea de su agrado. 

Perdon que este tan cortito si? Sorry!! Es que mi mama me saco del pc u.u

Besitos y saludos desde Venezuela :D 

Karma, karma, karma, Karma maldito! Debí suponer que luego de insultar mentalmente todo el día a aquella pechugona y desearle que se cayera y diera de boca directo al piso, no iba a pasar desapercibido para el Karma. Pero no se cayo a fin de cuentas, Dios no escucho mis suplicas. Aquella chica era una perra con suerte.

Luego de que Matias invadiera mi casa y luego mi habitación para caer inconsciente en mi cama, intente hacerme un espacio para dormir, pero era algo difícil cuando su cuerpo ocupaba espléndidamente cada centímetro del espacio libre. Debía tener una fantasía donde era un erizo de mar o una estrella. Y con zapatos! Estaba tirado en mi cama son sus zapatos llenos de todo lo que recogió en la travesía de llegar a mi casa que parecia una mezcla de grama, lodo, piedras y... ¿Arena de playa?

Al final y luego de tratar de mover a aquel peso muerto, comenzó mi infierno personal. En que diablos estaba pensando? Era imposible dormir, luego de que me acoste (quede en una esquina diminuta mal diciendo a aquel ebrio hermoso) intente conciliar el sueño. Y cuando por por logre dejar de babear por la foto mental de sus labios rojos entre abiertos y deslizarme suavemente hasta los brazos de mi amado Morfeo, una mano se afirmo a mi cintura y claro como no? Me abrazo!!! el quedo de lado y coloco una pierna sobre mi cuerpo y su mano sobre mi cintura. MIERDA!! MIERDA!!! Y yo que me contenía para no abusar de el estando inconsciente en mi cama.

Desgraciado!

Su aliento a Vodka me comenzaba a embriagar, y tal ves no era mucho la presión del alcohol, aunque prefería tapar mi debilidad bajo la mascara del alcohol la verdad es que tener su rostro tan cerca del mio resultaba mortal. El sudor frío comenzaba a causarme incomodidad y comenzaba a preocuparme por si estaba desarrollando taquicardia. Un deseo desenfrenado y potente de sentir la suavidad de esos labios me estaba carcomiendo. Lo necesitaba, lo quería, lo deseaba desde hace muchísimo tiempo.

Con su respiración caliente en mi nuca, me debatí si hacerme a el o no. Dios! No podía creer lo que estaba haciendo! Un latido, dos, tres... siete latidos habían transcurrido y yo aun no me atrevía.

Ay Dios, Ay Dios Ay Dios!!!! Que voy a hacer??. Una idea cruzo mi mente y me hizo sentir de verdad idiota. Primero tenia que asegurarme que estuviera profundamente dormida. No quería que cuando estuviera sobre sus labios abriera los ojos y yo fuera descubierta de forma tan patética. Lo moví un poco buscado algún indicio de conciencia o sobriedad de su parte. Lo intente otro pare de veces mas y nada. Aun no volvía a la tierra, se encontraba divagando en el País de las Borracheras. Esa era su versión de un País de las Maravillas.

De nuevo, con el corazón en la boca y la razón gritan dome que me aleje, me fui acercando poco a poco. Pasaron minutos, segundos, tal ves pudieron ser horas. Me acerque exageradamente lento, estaba demasiado asustada como para lanzarme sedienta al dulce sabor de sus labios. Cada centímetro que ganaba su calor me abrazaba, su colonia Black de Antonio Banderas lo hacia irresistible, se me hacia sexy como un demonio,y un olor dulzón se mezclaba con la colonia, cuando me acerque un poco mas reconocí la esencia. Perfume de mujer. Aquel perfume dulzón en extremo y con el cual había que tener cuidado al usarlo se impregno en la ropa de mi amigo.

Una punzada de dolor me llego al corazón y detuvo mi avance que a pesar que tal ves no habia sido mucho a ojos de un extraño, para mi era lo mas cerca que jamas estaria. Realmente estaba cerca, solo debia girar un poco el rostro y posar mis labios sobre los suyos. Decida y mas convencido que nunca que el jamas me pertenecia sino que seria un chico de todas, me acerque reduciendo el espacio que nos separaba. Y gire mi rostro un poco para amoldarme al suyo, relamí mis labios y los separe sintiendo ese ardor que quemaba por dentro y exigía el tacto con los labios de aquel chico. Y asi lo hice.

-Melissa...

un susurro bajo se escapo de sus labios y yo que me encontraba con mis labios rozando los suyos sin presionarlos realmente pude entender perfectamente lo que dijo.

Me aleje como si su cuerpo quemara, me separe de el de mala gana y salí de la habitación, era estúpido, nosotros no eramos nada yo solo era su amiga y aun así me sentí traicionada, sentía rabia, dolor, tristeza. Aquellas palabras le abrieron las puertas a una solitaria lágrima que recorrió mi mejilla.

Melissa, la chica mas popular del insituto por la que Matias babeaba incontrolablemente, no debía sorprenderme que haya dicho algo como eso. Lo que no sabia era hasta que punto sufriría por culpa de Melissa, cosa que ella se encargaría de hacerme saber por las malas. 

Hola Hola :D

Que tal? Les gusto?

PREGUNTA DEL DIA!

Alguno ha pasado por eso? La situacion de querer besar a alguien sin ser descubierto?

Espero sus respuestas :D Besos!

Hola Hola :D Chicas y chicos como estan? Espero que bien!

Aca les traigo un nuevo capitulo de la historia, aunque parece muy pronto ya debo ir encaminandola :D
 

Sin mas nada que decir pues a leer! Espero les guste!

-Hey! Hey! Te estoy hablando Natalia! -su voz, el de nuevo- me puedes explicar que te pasa conmigo?

Rodee los ojos y en mi rostro se poso una expresión de fastidio.

-Por Dios Matias el mundo no gira a tu al rededor. Desde cuando tienes complejo de “Todo gira en torno a mi” -hice comillas con los dedos.

El puso mala expresión, sabia que algo me pasaba.

-Pues desde que me miras mal Natalia, o se te olvida que no te conozco desde hoy? Tengo años conociéndote niña, así que dime de una buena ves que te pasa.

-Es que no me siento bien Mati, no tiene nada que ver contigo, es un idiota que me esta fastidiando y sabes que no me interesa ninguno de los tarados que estudian con nosotros.

Menti. Eso era mejor que decirle, “recuerdas el dia que caiste inconsciente en mi cama? Pues esa noche estuve a punto de besarte y justo cuando rozamos nuestros labios dijiste el nombre de otra mujer y desde ese dia estoy molesta contigo por ser tan imbecil”.

-Aun no comprendo porque no te das una oportunidad con alguno de ellos -me djo- ya te he dicho que deberias intentar algo con alguno, tienes a varios de esos idiotas babeando por ti.

-Lo se Matias, es que sencillamente no me llaman la atención. Que puedo hacer? -me encogi de hombros.

Matias solo exhalo pesadamente y me miro como muchas veces antes lo había hecho.

-Hay niña que voy a hacer contigo? -sus manos desordenaron mi cabello hasta tener el aspecto de un nido de pájaros.

-Quiereme idiota -sonreí y acomode mi cabello.

-Yo te quiero ridícula

La respuesta de mi corazón fue obvio, un latido fuerte azoto mi pecho y me lastimo. Corazon traidor.

-Si claro -Sonreí con amargura.

-Vamos a clases brujilla, antes que el idiota del profesor nos cierre la puerta en la cara y nos tengamos que quedar como imbéciles afuera.

Me llevo a rastras de aquel lugar y corrimos entre los pasillos, mientras nos acercábamos vimos una espalda que era cubrierta con la imagen de una puerta.

El profesor llego un par de segundos antes y cerro la puerta tras de si. Toque insistentemente esperando que saliera.

-Profesor acabamos de llegar, podemos pasar? -estaba jadeando por lo que mis palabras salían poco claras.

-El primer día de clase puse mis normas, el que llegue después de mi se queda por fuera y si alguno pone un pie adentro del salón después de mi, el que se sale del salón soy yo -respondió arrogante, cerrando la puerta en nuestras narices.

Cabrón!

-Este hijo de puta! Que mierda se cree? -Matias estaba molesto e intentaba moverme para tocar la puerta de nuevo.

Se encendieron mis alarmas. Comencé a jalonarlo lejos de ese lugar, no era recomendable que el profesor saliera y por la bocota de Matias .

-Vamos! Muévete que nos van a castigar si insultas al profesor -me queje. Era muy difícil mover a un sujeto con 2 veces mas fuerte que yo.

-Ah! Joder! Y ahora que hacemos? -dijo frustrado- Ves? Por perseguirte!

-A no! No vengas a culparme a mi, no te mande a que anduvieras en el papel de mama gallina -me defendí hundiendo mi dedo índice en su pecho.

-Bueno ya que hacemos. Tienes provisiones? -pregunto mi amigo.

-No mucho, tienes dinero? -pregunte rebuscando en mis bolsillos.

-Lo deje en el bolso, joder ya no me queda nada.

-Ah! Mira aquí tengo unos caramelos.

La inspección a mis bolsillos había dado resultado. Varios caramelos de distintos sabores que había comprado justo esa mañana fueron nuestra salvación. Blog para amantes del chocolate

-Bien! Esa es mi chica -Me regalo esa sonrisa de medio lado que me hacia temblar el alma y tomo un par de caramelos.

Marijo, Marcos y el resto de locos maniáticos que cerraban nuestro grupo de amigos. Eramos un grupo medio raro, no eramos los mas populares ni los mas guapos, ni los mas adinerados o inteligentes. Pero eramos un grupo bastante homogéneo y aun con nuestras diferencias encajábamos perfectamente como un rompecabezas. Y eso extrañaba mucho a algunos. Eramos un cazador (Matias), El musico, Oro que se la daba de Romeo y Marijo y yo. No se me ocurre bien una etiqueta para nosotras.

Nos fuimos a la sombra de un gran árbol que había en uno de los jardines mas alejados de la institución. De camino hacia aca hubo un momento incomodo en el cual nos encontramos a Antonio. Verán, hablar de Antonio no es como se hablaría de cualquier chico promedio de 18 años. Para el solo había un calificativo: Misterioso. Ese chico era un caso totalmente aparte, no había una forma sencilla de describirlo ni palabras que se adapten. Es simpático sin embargo al parecer tiene una manía por mantenerse alejado de los grupos grandes, es extraño cuando se ve metido en equipos y solo habla con varios pares de chicos en todo el instituto. Tenia ojos grises, es blanco, con cabello negro azabache brillante, rebelde y que da ganas de acariciarlo. Su tamaño seria entre los 1.70 y 1.80m.

Mientras Matias y yo caminábamos hasta el jardín nos tropezamos con Antonio y este parecio traspasarnos con la mirada, pense que había sido raro pues el no suele demostrar mucho sus emociones. Me senti debil y desprotegida ante los fríos ojos de este chico. Parecía intentar darme un mensaje sin embargo, a mi no me llego nada.

Matias me jaloneo y continuamos nuestro recorrido. Si, aquello fue extraño.

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-Ah!! Me aburro! Ya se nos acabaron los caramelos y ahora que hacemos?? -Matias no paraba de ver el reloj. Desde hace mas de una hora se habían terminado los caramelos.

-Acaso tengo un manual de “Como pasarla bien cuando un profesor bastardo te deja por fuera”?- su insistencia me hastiaba

-Y no tenemos nada de dinero. Somos unos vagabundos, indigentes, muertos de hambres, caídos en miseria-sus gestos de dramatismos eran de lo mejor si lo que querías era perder tiempo.

-Jajaja estas loco lo sabes? -le solté entre risas- Por ahora no podremos conseguir dinero. Y pedir limosna no es una opción así que ni se te ocurra.

Le advertir antes que se le ocurriera la genial idea. Una ves por una apuesta fue a un salon con las chicas y puse su mejor sonrisa endemoniadamente sexy y su mirada de galán y pidió dinero como un gatito hambriento, alegando que había perdido su cartera y no quería irse caminando a casa. El muy bastardo llego con las manos llenas de dinero y el ego por el cielo.

-Ya se!! Porque no vamos donde los idiotas a los que les gustas y poner tu mejor cara y les pides que si porfavor te pueden dar un poquito de dinero -su tono lo hacia ver como la mejor idea de todas.

Yo lo mire con los ojos desmesuradamente abiertos y sin poder dar crédito a tan idiotas palabras.

-Queeeeeee?? -grite- déjame pensarlo.... a ver....NO! -mi voz sonó chillona y estruendosa

-Pero si mi plan es perfecto! -Dios que idiota es- solo debes sonreirle y ya! -levantaba sus manos al aire intentando darle fuerza a la sarta de estupideces que decía.

-Aja y tengo cara de pedir limosna? -enarque una y le lance una mirada envenenada.

-Dios! Pero que tiene de malo? Es un plan brillante -se defendió.

-Tiene de malo la parte donde tengo que actuar como puta limosnera para pedir dinero a unos sujetos que no dudaran ni un segundo en ponerse en plan de conquista -trate de hacerlo entrar en razón.

Que mal amigo tenia. Lanzándome a los buitres.

-Ah! Pasaremos hambre porque no sabes seducir. O te da miedo? -dijo desafiante.

De toda esa oración lo único que me dolió e importo fue “no sabes seducir”, eso era la confirmación de que no le fui, ni le soy atractiva, sensual y sexy. Jamas me vio con esos ojos. Una cosa es saber que me ve como una amiga y otra muy distinta es oír de sus labios “no sabes seducir”. Era claro, no le atraigo y eso golpeo mi orgullo con una fuerza aplastante. Mi voz salio movida por la fuerza mas poderosa del mundo. El orgullo de una mujer.

-Esta bien, lo haré -musite ocultando el dolor producido por su palabras

Matias se volteo a verme y reconocí la preocupación brillando en sus ojos.

-No, no, no, nena de verdad no es necesario que hagas algo que no quieres en serio-dijo en un susurro.

Idiota! Ahora vienes a decir eso? Pues ya era tarde Matias. Veras lo que esta chica que “no sabe seducir” puede hacer.

-No, no pasa nada, también tengo mucha hambre. A quien crees que sea buena idea pedirle? -Sonreí en un intento de mostrarme con el control de la situación.

-Estas segura? -no parecía convencido.

Me levante y comencé a acomodar mi cabello.

-Por su puesto. Quien es el mas guapo de ellos? -insistí pareciendo emocionada. Sonrei con ganas.

-Y yo que voy a saber? Ni que fuera maricón -sonreí ante sus ocurrencias.

-Iré con Mauricio, a esta hora su aula debe estar en aula de deporte cierto?

-Si, tenemos juego con ellos dentro de un rato-afirmo el.

-Vamos entonces.

Y nos encaminamos al las canchas de deporte. Los aplausos, gritos, abucheos y pitos se hacían mas intensos a medida que nos acercábamos. La verdad era que comenzaba a considerar esto una mala idea, mi corazón comenzaba a protestar y mis piernas a fallar. Que le diría? Hola, me das dinero? Pues no. La verdad era que yo no era muy experta en esto de seducir y no tenia ni idea que iba a hacer.

Llegamos a la cancha que le correspondí a el por horario y ahí estaba, en la banca, sudado y mirando el juego como si fuese todo un misterio que descifrar. Busque a Matias con la vista y el se habia quedado unos cuantos pasos atrás y me miraba mientras lograba el milagro se “seducir” a alguien. Dios que catástrofe.

Inhale profundamente y acorte la distancia entre la cancha y yo. Las bordee para quedar en la linea de visión de Mauricio. Hice señas como un arbitro, me veía ridícula. Había llamado la atención de varias personas menos las de el. Pff! Estúpido. Por fin alguien le hizo señas de que me mirara y por fin obtuve su atención. Este abrió los ojos sorprendido y se señalo. Yo asentí y lo llame con las manos. El vino tratando hasta mi y en un minuto lo tuve de frente. Alto y con su cuerpo trabajado por el entrenamiento.

El me sonrío de lado al verse inspeccionado y yo me sonroje al verme descubierta. Diablos! Esto no estaba funcionando.

-Te gusta lo que ves preciosa? -me sonrío de lado y tomo uno de los mechones de mi cabello y jugo con el.

A estas alturas yo estaba roja como un tomate y el sonreía ganador. Seguro Matias también se reía... Y lo recordé. Matias. El era el causante de toda esta locura. Debía obligarme a coquetear y volverme seductora.

Comencé por ignorar su comentario anterior y centrarme en lo mio.

-Hola Mauricio. Como estas? -levante la vista y dibuje una sonrisa inocente en el rostro.

-Bien preciosa y tu? -cambio el peso de un pie a otro.

-Bien, gracias. Sabes? no creerás lo que me ha pasado hoy -cambio de sonrisa. Debo comenzar a jugar entre la linea de la inocencia y la picardía

-He estado por los pasillos caminando y sin darme cuenta se me ha ido el tiempo y el profesor me ha dejado por fuera- hice un puchero cruzando los brazos, resaltando así un poco mis senos- Y ahi estaba mi dinero, y no he podido comprar mi desayuno a tiempo.

Mi actuación estaba saliendo bien, en realidad comenzaba asustarme pues me salia natural. El me miraba sorprendido mientras hablaba.

-Y ahora me he quedado sin comer porque no tengo dinero – clave en el mi mirada y una sonrisa que no conocía se poso en mis labios- podrías prestarme para ir a comer y te los paso luego?

Y hice algo que ni yo misma me esperaba, levante mi mano hasta su rostro y atrape una gota que recorría su cien. El me vio y su rostro mostraba incredulidad y sorpresa. Pero luego volvió a la arrogancia.

-Esta bien linda, espérame aquí.

Y se dio vuelta, así como así, comenzó a avanzar hasta su bolso que estaba en la banca. Sus manos rebuscaron entre el bolso y varios sobres salieron de ellos, me miro por un segundo y luego los sobres y a mi de nuevo. Sonrío y en poco tiempo lo tuve de nuevo frente a mi. Solo en ese momento me di cuenta que todos nos miraban.

-Te ofrezco un trato -ya sabia que no todo podía ser tan fácil pensé- este fin de semana hay una fiesta en mi casa -me tendió uno de los sobres- si aceptas puedes quedarte con el dinero sin problemas. Tómalo como un regalo.

Maldición! Esto no estaba en los planes! Que hago?? Joder! Todo es culpa de Matias, bueno al diablo con el, si vuelvo con la invitación es mas que obvio que logre seducirlo.

-Esta bien Mau. Iré. Gracias -sonrisa falsa de nuevo

Me gire para irme pero me tomo por el brazo y me giro, estaba demasiado cerca de mi para cuando quise enfocar mi vista. Solo logre girar un poco mi rostro para que sus labios no se estamparan en mis labios, sin embargo los sentí en la comisura de mis labios.

-Chao preciosa.

Y se giro sin darmé oportunidad de replica. Yo me quede con los ojos abiertos de la impresión y la boca formando una perfecta O. Escuche los gritos y silbidos de sus amigos por la escena que acababamos de protagonizar.

Mierda, mierda! Que acaba de pasar? Casi me besa! Me voltee lentamente para encarar a Matias. El causante de toda esta maldita locura. Lo vi y su rostro era uno muy distinto a lo que esperaba. No había expresión de burla, mas bien sorpresa.

Levanto el pulgar en señal de aprobación y me sonrió.

Doble mierda! Ahora este me apoyaba. Joder!

En que puto lío me metí.

Que tal?Les gusto??

Espero que si :D Comentarios? Criticas? etc etc etc :D

PREGUNTA DEL DIA!!!! *__*

Que es lo peor que han hecho por cumplir una apuesta??

Hola chicas y chicos. Como la estan pasando? Espero que muy bien! :D Aqui vego con un nuevo capituo que espero que sea de su agado. Ya saben, criticas, animos, tomatasos y esas cosa pueden dejarmelas en un comentario junto a su opinion :D

Por cierto... Este es el capitulo mas largo que he escrito! 10 hojas en word! Y vaya que me ha costado!

Ahora si a leer :D

Que se definía como el cielo y el infierno? Acaso el cielo era una especie de castillo sobre las nubes como la película de Barbie? O el infierno era... a ver. Jamas me había puesto a pensar como era el infierno, pero solo se me ocurría un lugar con fuego y calor por doquier. Esta bien tal ves no tuviera mucha imaginación con respecto al infierno pero vamos! La gente siempre se emocionaba mas con la perspectiva del cielo, con sus nubes, dulzura y mundo de las fantasías que con el infierno. Caliente, tortuoso e inevitable para algunos.

Una ves escuche: “El infierno es aquel lugar donde nos encierran con las consecuencias de nuestros actos” y vaya que aquello era cierto. Cual había sido la consecuencia directa de actuar con el orgullo y arrogancia coqueteando con Mauricio? Pues fácil! Ahora estaba con un animo de los mil demonios intentando meterme a la fuerza un vestido corto azul rey.

El jodido vestido era realmente lindo y coqueto. Tenia en la parte del top y un corte en V que mostraba los senos. Era de tela tijera y transparente, sin embargo eran varias capaz de esa tela, motivo por el cual no mostraba demasiada piel. Ahora se preguntaran ¿que paso antes de todo esto? Pues facil!!

Flash Back

-Que paso nena? -fui inspeccionada apenas llegue.

-Listo -afirme- aquí esta el dinero. Larguémonos a comprar, muero de hambre. -musite ya de mal humor.

¿Como coño saldría de ese lio? Porque acepte esa estúpida invitación?

-Que es eso? -Matias se detuvo a mi lado y me quito el sobre- Vaya! Este si que es rápido, ya te invito a la fiesta?

Apreté los dientes. Seria posible que sintiera al menos un poquito los celos? De alguna forma atenuada?

-Si -afirme- que tal son sus fiestas? -Repuse.

-Son muy buenas, ya sabes, son el tipo de fiestas que se terminan al día siguiente -contesto tranquilo con una sonrisa picara, tal ves recordando alguna ocasión en una de esas fiestas.

-Crees que deba ir? -inquirí inocente.

Por favor dime que no vaya, por favor dime que no. Pensé con todas mis ganas esto, solo un mal gesto o una reacción de el mi pobre y angustiado corazón sentiría alivio.

-Pues, si quieres -Nada de celos. Otro golpe al corazon- son buenas. Pero son una locura -de nuevo aquella sonrisa adorno su rostro.

-Yo voy con Gabriela y tu?- pregunto desinteresado.

-Ah.. la verdad no se... me acaban de dar la tarjeta pero..-me detuve en seco-Vas con la nueva?

-Como diablos paso eso? -estaba impresionada- No tiene ni una semana! Como es que vas con ella a la fiesta?

El sonrío con encanto y casi termino de rodillas a sus pies. Su mirada se ilumino y ensancho mas la sonrisa mostrando sus dientes perfectos y alineados. La emoción se coló en su tono de voz.

-Pues fue muy fácil! -comenzó emocionado por su nuevo logro- Hoy espere a que saliera de clases y le dije que pronto habría una fiesta y que la mejor forma de que conociera gente nueva era yendo a esa fiesta y listo! Dijo que si.

-Ja! Que tonta, como se creyó eso? -la verdad tenia mucha lógica- Joder ahora yo no tengo con quien ir.

Joder. Aparte de tener que ir a aquella fiesta ahora también tendré que arrastrarme hasta a algún chico y invitarlo a la fiesta. Aunque no creo que sea necesario, en las fiestas así cada quien llegaba por su lado no? Después se vuelve una locura y uno nunca termina con la misma persona que llego

-Que? Acaso no vas a ir con Mauricio? -Matias me miraba con el ceño fruncido.

-Que? Porque debería ir con el? De que hablas? -La confusión hizo implosión en mi

-Claro, el te invito, no crees que lo mas lógico es que vayas con el? -inquirió como si eso fuera lo mas lógico del mundo.

-N-no... -tartamudee- yo... nosotros no quedamos en eso...

Confusión, confusión, confusión.

Intente repasar nuestra conversación en la mente para saber si el me había invitado sin yo haberme dado cuenta.

Primero recuerdo haber sido descubierta devorando su cuerpo con la vista.

-Te gusta lo que ves preciosa?.

Mierda!.

-Hola Mauricio. Como estas?.

-Bien preciosa y tu?.

-Bien, gracias. Sabes? no creerás lo que me ha pasado hoy.

-He estado por los pasillos caminando y sin darme cuenta se me ha ido el tiempo y el profesor me ha dejado por fuera. Y ahi estaba mi dinero, y no he podido comprar mi desayuno a tiempo. Y ahora me he quedado sin comer porque no tengo dinero.

-Esta bien linda, espérame aquí.

-Te ofrezco un trato- doble mierda!- este fin de semana hay una fiesta en mi casa -me tendió uno de los sobres- si aceptas puedes quedarte con el dinero sin problemas. Tómalo como un regalo.

Porque mierda debía sonreír así?

-Esta bien Mau. Iré. Gracias -sonrisa falsa de nuevo

Triple mierda! No sabia si el hecho de simplemente de haberme invitado implicaba ir con el.

-Ehh! Venga mujer! A que hora nos vemos? -La voz de Matias me saco de golpe de mis pensamientos. Su rostro estaba tan cerca de mi que me quede hechizada con su rostro, su cercanía, sus ojos... Ay mi Dios! Esos penetrantes ojos... sus labios... Besame por favor, pensé.

-Natalia! Te estoy hablando! -me zarandeo por los hombros haciéndome salir de mi delirio.

-Que? De que hablas? -cuestione triste. Por un mini segundo desee que me besara, como tantas otras veces lo había deseado. El deseo de sentir sus labios sobre los mios me quemaba desde adentro y se abría paso hasta mi corazón haciéndolo latir descontrolado y frenético.

-Pff! En que mundo andas mujer? -cuestiono- Quedamos con las muchachas en ir hoy al centro comercial a comprar unas cosas.

-Ah si, cierto -musite con la voz débil. Aun no me había repuesto de la ruptura de mi pequeña fantasía.

No tenia idea de que carajos me hablaba pero después preguntaría a Marijo.

-Me pasas buscando? -pregunte sin saber que mas decir.

-Si, claro.

Fin del Flash Back

En 20 minutos llegaban los muchachos a buscarme. Yo estaba entre lo casual y lo elegante, sin embargo podía pasar fácilmente por el atuendo a usar en una fiesta de ese tipo. Marijo me había obligado prácticamente a comprar el jodido vestido. Era muy sencillo, unos zapatos altos negros de tacón junto con el vestido azul rey. Sencillo pero sexy.

Y ahí estaba yo, en la camioneta camino a la casa de Mauricio. Todos iban muy bien aunque por su puesto el único que fue sometido a mi escaneo casi en rayos X fue Matias. Porque mierda tenia que verse tan endemoniadamente sexy? Como puede verse así de bien el muy desgraciado? Cargaba un pantalón negro intenso y una camisa azul rey de botones. Joder! Incluso vamos a juego los 2, sus ojos brillaban intensamente y me sentía indigna de ser mirada por esos ojos. Mierda!

En 30 minutos mas llegamos a una urbanización privada grande. Mi boca se abrió en una perfecta O. Era una mansión, una MANSION! Porque nunca me habían dicho que Mauricio vivía en una mansión? Habían guardias en la entrada y personas allí de seguridad. Cuando paso esto? Oí risitas a mi al rededor y me gire a ver los rostros de mis amigos.

-Que? -pregunte aun en mi estupor.

-Ya recogista la baba? Te quedaste viendo como estúpida.

-Callate Marcos -replique- Mauricio vive en una mansión?

Estaba shockeada todavía! Era una casa gigante!

-Nombre por favor -habíamos llegado a la caseta y uno de los sujetos que parecían sacados de hombres de negros nos pregunto nombres interrumpiendo la breve conversacion.

-Natalia Fernandez -dije con seguridad.

Este reviso en una larga hoja blanca, levanto la mirada y secamente dijo:

-Adelante.

Llegamos y nos aparcamos donde pudimos. Ese lugar estaba a reventar! No cabía un alma mas! Nos bajamos de la camioneta con aire arrogante. Eso era algo que nos habían criticado mucho pero no lo evitábamos, cuando andabamos todos juntos caminabamos como si fuéramos de la realeza, todos nos miaraban y en el fondo nos encantaba llamar la atención. Por su puesto, Marcos y Matias eran unos idiotas con un cuerpazo de infarto y Fernando era el musico y tocaba como un Dios y ademas era muy lindo. Le seguiamos Marijo y yo. Eramos 5 locos sin remedio.

Entramos a la gran sala, y había comprobado lo que se veía desde fuera ¡Aquella casa era inmensa! Tenia 3 pisos y habitaciones, pasillos, salas mas comedores que 3 casas juntas. Todo era de un lujo que se veía en películas o telenovelas de narcos. Las paredes eran de un blanco extremadamente pulcro, casi sentía lastima por las personas del servicio que debían asegurarse de que las paredes siempre estén relucientes. Por fin nos llevaron hasta una puerta grande y al abrirla se desato el caos.

Allí se desarrollaba la fiesta, pero en realidad aquello no tenia lógica ni sentido. De no saber que estabas en una casa podría pasar perfectamente por un club. ¡Parecía una disco! El humo, la musica, la bebida, todo estaba al máximo. Las personas se apretujaban entre si y un Dj se alzaba en una tarima con musica bastante sugerente. Un par de siguientes después la musica se detuvo y sentí pánico al pensar que podía ser culpa nuestra pero solo se debía a un concurso de baile entre chicas. De paso estaba paranoica!

-Matias por fin llegaste! - Gabriela llego de improvisto lanzándose a los brazos de Matias.

Esta perra fácil si que era rápida. No pude evitar apretar los puños y casi hacerme daño en la piel de las manos.

-Claro preciosa, yo te dije que vendría no? - su mirada recorrió sin ningún disimulo el cuerpo de “Gaby” como ahora le decía. La muy zorra no había podido sostener mas su careta de niña buena, ahí estaba con un corsett rojo y una falda negra que casi mostraba su trasero por completo y unas botas negras. Acaso no le importaba parecer una bailarina de tubo? Seguramente no.

-Ven vamos quiero mostrarte a quien conocí hoy -le susurro. Aunque pudimos oírlo todos perfectamente.

Y asi se lo llevo arrastrado hacia otro extremo de la gran sala. Yo me quede maldiciendola en silencio y fulminándolos a ambos con la mirada. Maldito matias y maldita fácil de Gabriela.

Y en menos de lo que pude notar, estaba sola! Todos se habian ido, eran unos traidores! Anduve entre las personas y intente alejarme lo mas que pude de el centro de la sala que es donde todos bailaban casi con desenfreno y una ansiedad notoria. Se encontraban en una burbuja y no seria yo quien los sacaría de ella abriéndome paso por la pista.

Un mesero se paro frente a mi con una bandeja y gran variedad de tragos en ella.

-Desea tomar algo? -se poso frente a mi con su tono servicial.

-Que tienes? -Quería preguntarle que tragos tenia pero creo que la forma en que lo dije no era la mejor.

-Depende sus gustos, señorita -su mirada fue de la bandeja y luego a mi- Tenemos tequila, vodka, martini, whisky, ginebra, ron y algunas mezclas que son un poco mas fuertes señorita.

-Mezclas? - el mesero abrió los ojos sorprendido- que tipo de mezclas?

El pareció pensárselo un segundo y luego prosiguió.

-Están a su gusto -asentí- la mas común hoy a sido el Sexo en la playa. Es una bebida mezclada con Ron, vodka, whisky y ginebra.

Yo sonreí maliciosamente, no sabia porque pero ese trago me atraía y me retaba.

-Sin embargo señorita -me miro preocupado- es una bebida muy fuerte y causa efecto muy rápido.

Estaba a punto de decirle que tal ves podría preparármelo en pequeña cantidad cuando alguien me interrumpió.

-Pero mira quien tenemos aquí -levante la vista hacia la voz masculina- no sabia que fueras tan atrevida preciosa.

Mauricio estaba frente a mi con sus ojos levemente rojos y su sonrisa galante. Joder este chico era muy guapo, porque nunca lo había notado? Ah! Por supuesto, mis ojos estaban demasiado ocupados en gravar cada detalle del cuerpo de Matias, de su risa, de todo lo de el que en un principio me arrebato el corazón. Ese era un hecho irrefutable, Matias se había robado mi corazón y yo no pude hacer nada para evitarlo. Deje de pertenecerme a mi misma por una sonrisa tuya.

-Hay muchas cosas que no sabes de mi Mauricio -mi mirada desafiante fue dedicada solo a el- dame uno -estire mi mano hacia el mesero si dejar de mirar a Mauricio.

-Que sean 2 – dijo este sonriendo mas ampliamente.

EL muchacho nos sirvió a ambos en vasitos pequeños y nos paso a cada uno nuestro respectivo baso.

-A tu salud preciosa -sonrío y choco su copa con la mía.

-Salud -repetí

Y de golpe ambos nos tomamos el contenido hasta el fondo. Y fue horrible. Chille cuando el fuerte sabor de esa infernal mezcla me quemo la garganta y mi rostro hizo muecas. Mire a Mauricio y este también tenia una expresión en la cara similar a cuando se come algo cítrico. Varios segundos después varias personas se unían a nuestro espectáculo. De nuevo la sonrisa de arrogancia adorno su rostro.

-Otro! -pidió al joven que no se había marchado- a menos que no quieras mas... -su tono dejaba claro el desafío.

-Dame otro -de nuevo mi mirada se perdió en la suya y una sonrisa igual de desafiante que la de el, adorno mi rostro.

No se en que momento tuvimos tanto publico que solo oía voces que cantaban a coro “Otro, Otro, Otro” o “hasta el fondo” o cosas asi. Persona dandonos animos. Por mi parte hace muchisimo rato me habia dado cuenta que estaba en problemas, todo me daba vuelta y tenia miedo de moverme y terminar cayendo de boca al suelo.

No sabia cuantos tragos llevaba tal ves 7 o 8. Que mierda, estaba totalmente ebria y no llevaba ni 2 horas en la fiesta. Estaba en problemas, realmente estaba en problemas.

-Que tal si dejamos esto y bailamos un rato -Mauricio interrumpió mis pensamientos y me dio lo que parecía una milagrosa salvación. Todos corearon un “noooooooooooooo”

-Esta bien -sin embargo no me moví, tenia miedo de no ser capaz de dar un paso y el lo noto.

-Sujétate fuerte de mi brazo -me susurro al oído sujetando fuerte mi cintura.

-Gracias -dije inclinándome hacia el y dando e primer paso.

Y como lo imaginaba mis piernas me fallaban, pero aun podía caminar, no todo esta perdido.

Llegamos a la pista de baile y comenzamos a movernos lento con comparación con la musica, ahora que veia bien a Mauricio estaba también tambaleándose, era obvio, el había ingerido la misma cantidad de alcohol que yo. Me di cuenta que lo estudiaba de pies a cabeza, hasta que note que buscaba en el las cosas que amaba de Matias, los comparaba. Maldita sea! No me vas a joder esta noche Cupido. Con una recién adquirida ira, me decidí a olvidarlo, a no pensar en el. A traicionarme a mi misma y a ese amor del cual el no tenia idea. Poco a poco, centímetro a centímetro comenzamos a acercarnos y a bailar al ritmo de la musica, dejándonos llevar, lento y sensual. Estaba decida a pasarla bien, si me arrepentía mañana pues al menos sabría que valió la pena.

La musica fue bajando y sonó una canción nueva y maldije ¿Porque esa canción?

-Oh, joder -musite tan suave que no paso de ser un susurro.

-Que ocurre? - De nuevo los ojos miel de Maurcio me requisaban.

-Es que...-mordí mi labio inferior inconscientemente- esa canción me encanta ...Mauro.

Oh mierda! Yo dije eso? Jodido alcohol comenzaba a causar un daño real. Los ojos de Mauricio brillaron y se acerco mas a mi.

-Entonces vamos a disfrutarla -me susurro al oido y me estremecí.

Me quede congelada en el acto sin embargo sus manos se posaron en mis caderas y comenzaron a incitar moviente. Jamas pensé que Mauricio bailara tan bien, sus caderas se mecían y chocaban con las mias de una forma tan seductora que yo me soltaba y relajaba en sus brazos. Cada ves me pegaba mas a el. Mi trasero rozaba su pelvis y podía sentir su pecho en la piel de mi espalda. Sentía un cosquilleo extraño, pero yo solo quería seguir bailando, no deseaba que aquello acabara. Con un movimiento me voltee y quede frente a el. Su mirada me hizo estremecer de nuevo. Jamas ningún hombre me había mirado de esa manera y lo mas extraño de todo fue que me gusto.

Su mano se poso en mi cintura y las mías volaron a su cuello y así juntos seguimos bailando. Me perdí de todo, del tiempo, incuso olvide donde estaba, y solo era consciente levemente de la manos que ardía en mis espalda y la que sujetaba firme mi cuello. Solo me di cuenta que la canción había terminado cuando Mauricio me arrastraba hacia un lugar que no tenia idea donde era. Pasamos por varios pasillos, yo protestaba pero el no me escuchaba solo seguía tirando de mi como una muñeca que no mesa 1kilo. Yo estaba muy mareada y me costaba caminar sin caerme.

Abrió una puerta y me vi empujada a entrar y cerro tras de mi. Iba a preguntar que sucedía cuando me apretó contra la pared y quede atrapada entre el muro de concreto y su cuerpo bien formado por el entrenamiento de fútbol.

-Mauricio que pas-

Sus labios se estamparon contra los mios calientes y deseosos. Me quede paralizada un segundo y tarde otro segundo en intentar apartar sus brazos de mis caderas. Intente débilmente apartarlo de mi, estaba muy ida por todo lo que había tomado, cuando quise protestar y abrí ligeramente mis labios el aprovecho y su hábil lengua se introdujo en mi boca.

Un jadeo se escapo de mis labios y deje de protestar, su aliento a alcohol me embriagaba y me gustaba. Maldición ¿Que estaba haciendo? Moví mis labios al compaz de los suyos, acostumbrándome a su ritmo necesitado. Su beso era desesperado, ansioso, deseoso, todas esas emociones me embargaban con el movimiento de sus labios. Joder besaba muy bien. Peligrosamente bien.

Mis manos atraparon cuello y y sus labios descendieron hasta el mio. Sus labios atacaron sin piedad toda la piel que iba descubriendo y su lengua trazaba círculos dejando un humedo camino a su paso. Luego sus dientes raspaban y mordían suavemente mi cuello haciendome jadear. Mi respiración era superficial y alterada al igual que la suya. Mis manos de nuevo débilmente intentaron apartarlo, tal ves aun me quedaba un poco de cordura. Pero mi intento fue tan pobre que mis manos resbalaron de sus hombros y fueron a dar a su ancha espalda. Gemí frustrada.

-Natalia

Su voz. Mierda! La voz de Mauricio salio en un susurro ronco y temblé de nuevo.

-Me encantas... -susurro de nuevo y un débil gemido se escapo de mis labios cuando mordió de nuevo mi cuello.

Que era aquella sensación que me gustaba tanto? Sentía una incomodidad en el vientre, me molestaba pero era distinto a algo que hubiera sentido antes. Por primera ves en mi vida me sentí deseada de esa forma y me encanto. Me fascino!

La mano de Mauricio se poso en mi pierna y sentí su tacto caliente. Su mano iba ascendiendo, subiendo mi vestido poco a poco. Acariciaba la parte interna de mi muslo y se me escapo un gemido.

Aprendiendo a Seducir by Honda_Tohoru

 Hola. Soy Natalia y como podrán ver... me enamore de un idiota, estúpido, payaso y encantador chico. Aquel que me hace reír con cada palabra y llorar al n

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2025-02-19

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