Isabella la Joven Auror by Trysha
Isabella Weasley es un personaje de mi autoría, ella compartió parte de su edad escolar con Harry Potter, siendo mejor amiga de Ginny en esta etapa, aqui contaré todo lo que ella hizo para conseguir el amor del criador de dragones que le robo el corazón en primer año.
Categories: LITERATURA, HARRY POTTER Characters: Ninguno
Generos: Accion/Aventura
Advertencias: Muerte de un personaje
Challenges:
Series: Ninguno
Chapters: 3 Completed: No Word count: 3148 Read: 186 Published: 03/10/2011 Updated: 09/10/2011
Isabella Weasley es un personaje de mi autoría, ella compartió parte de su edad escolar con Harry Potter, siendo mejor amiga de Ginny en esta etapa, aqui contaré todo lo que ella hizo para conseguir el amor del criador de dragones que le robo el corazón en primer año.
Categories: LITERATURA, HARRY POTTER Characters: Ninguno
Generos: Accion/Aventura
Advertencias: Muerte de un personaje
Challenges:
Series: Ninguno
Chapters: 3 Completed: No Word count: 3148 Read: 186 Published: 03/10/2011 Updated: 09/10/2011
Los capitulos no son largos porque creo que a veces leer en este medio puede ser agotador. Espero que les guste.
Los capitulos no son largos porque creo que a veces leer en este medio puede ser agotador. Espero que les guste.
El reencuentro de dos viejas amigas. by Trysha
Un sorpresivo intento de irrupción en Hogwarts tenía a dos aurores en la enfermería del colegio, un grupo de hombres no identificados, trato de irrumpir en los lindeles exteriores del bosque prohibido y si bien las heridas de Patrick, uno de los aurores, no eran mortales, si requerían atención urgente.
- Charlie - dijo con voz urgente- Isabella, la otra auror.
El ex criador de dragones sacó su varita y se puso a recitar extraños hechizos en una lengua que Madame Pomfrey identificó como Rumano, la herida dejó de sangrar, pero Patrick comenzó a quejarse y finalmente perdió el sentido.
- Es efectiva, pero un poco fuerte - dijo Charlie mirando tiernamente a Isabella que en ese momento le lanzaba innumerables reproches con la mirada.
Llevaron al auror a una cama de la enfermería. Apenas lo instalaron Isabella comenzó a borrar la cicatriz.
- ¿Cómo está?- la inconfundible voz de Harry Potter, Jefe de Aurores, resonaba al final del pasillo.
- Bien - respondió secamente Isabella- pero ¿quién hizo esto?
Poco a poco, fueron llegando algunos aurores y otros viejos conocidos entre ellos, Ron y Hermione Weasley y Neville.
Y así sin más en la enfermería daba comienzo una nueva reunión de la Orden.
- Tal como esperábamos- dijo Harry - intentaron atacar el colegio.
- Fue un ataque selectivo, aunque eran varios no todos tenían intenciones de entrar- Bill desde la puerta hacía su primer reporte.
- Creo que han aprendido su lección, un colegio llenos de magos y con las defensas que este tiene no será nunca un buen lugar para atacar a gran escala, no pudo Voldemort con gigantes, menos podrán ellos- Hermione se escuchaba muy segura, sus palabras, como siempre, tranquilizaron a Harry y a los demás.
- Sin embargo, quedó comprobado que un ataque localizado es posible, por lo que esperamos más intentos de ingresar, y tememos que algunos estudiantes pertenezcan a grupos oscuros y los ayuden de manera interna.
- Listo - dijo Isabella, causando que todos se volvieran a mirarla- ¡Enervate!
Y apuntando con su varita el pecho Patrick comenzó a despertarlo.
- El reporte - dijo secamente Harry
Ginny no lo podía creer, él acababa de volver en sí y le pedían un reporte, sin embargo, se sorprendió mas al escuchar que este como si nada comenzó a explicar que dos sujetos trataron de entrar abriendo una grieta en el escudo pero no contaron con la vegetación puesta por Neville,
-Uno murió envenenado, el otro fue un poco más complicado, creo que me desconcentré, dijo mirando su costado.
Bien, tenemos que ir a interrogar a los prisioneros - dijo el jefe de los Aurores - Charlie, Hagrid necesita ayuda, hubo algunas criaturas heridas en bosque.
- ¿Y por qué no lo dijiste antes?- el musculoso pelirrojo se paró furioso como si le hubiesen dicho que su propio hijo había sido herido en combate y salió de la habitación como si invadieran el colegio.
- Nos vamos - dijeron los aurores y demás miembros de la Orden, salieron en silencio dejando solos a Patrick y las recientemente cuñadas, Ginebra Weasley e Isabella Andrevitch.
- Ya puedes quejarte- dijo Isabella riéndose.
- ¡Mierda!- dijo Patrick- ¿me curó Charlie?
-Sí, Desmaio- y un rayo de luz roja impactó en el auror.
-¿qué haces? - gritó escandalizada Ginny.
- Créeme él lo prefiere así, Charlie, tu hermano, es un excelente sanador, pero cura heridas con hechizos que generalmente se usan para curar dragones, es muy doloroso.
Las dos mujeres se miraron por primera vez en muchos años, mil preguntas venían a la mente de Ginny, pero no encontraban la manera de hacerlas, Hacia mucho tiempo habían sido las mejores amigas, pero luego Isabella desapareció del colegio y ahora aparecía 19 años después como la esposa de Charlie y era su cuñada.
- ¿Por dónde quieres empezar?- dijo sin rodeos Isabella, mirando fríamente a su cuñada.
- ¿Los mortifagos, te buscaban por qué te confundían conmigo?- preguntó tímidamente. Esta duda, la había carcomido por años y ahora por fin podría saber lo que siempre quiso.
- No - fue simplemente la respuesta de Isabella.
Luego tras mirar los ojos de su cuñada supo que su respuesta no sería suficiente, no es que no lo supiera en realidad, es que de verdad le incomodaba hablar sobre estos temas.
- Aunque te cueste creerlo, no tiene nada que ver contigo, la verdad nunca tuve muy claro que querían conmigo, como entenderás, no me detuve a preguntar. Pero averigüe que venían por mí, porque supieron que me comunicaba con algunos miembros de la Orden del Fénix. Isabella dijo esto de la manera que lo había ensayado, sabía bien que esta conversación se daría algún día, pero esperaba que con esto bastara.
- ¿Fue por qué estabas enamorada de Bill?- preguntó Ginny mirando seria a la que fuera su mejor amiga en la época de colegio.
- Nunca he estado enamorada de Bill, no sé por qué piensas eso, pero… ¿nunca te extrañó que me casará con tú otro hermano?
- La verdad sí, pero pensé que te habías rendido. Rápidamente la pelirroja se arrepintió de haber dicho esto después de ver los ojos de su cuñada.
- Supongo que nunca me escuchaste mucho- dijo triste Isabella- verás, conocí a Charlie cuando estaba en primer año, un amigo mío llamado Collin me pidió seguir a Harry, yo lo vi con Hagrid y lo seguí, caminaron un rato por el bosque y entonces vi los dragones que se utilizarían para las pruebas del Torneo de los 3 magos, uno de ellos me llamó demasiado la atención, no se veía tan terrible y quise tocarlo, por lo que me subí a su jaula, pero me caí, y cuando pensé que moriría, apareció Charlie, me tomó en sus brazos y me sacó de ahí, luego comenzó a retarme, pero yo solo tenía ojos para la mano que se quemo por mi culpa.
- Pero te vi hablando con Bill, muchas veces - insistió Ginny- e incluso una vez que me confundió contigo,… él me dijo que nos viéramos en el lago.
- Gracias por darme el recado- dijo riéndose Isabella.
Ginny más seria y centrada le hizo saber a su cuñada que el tiempo de conversar había llegado y que no habría forma de evitarlo esta vez, Isabella por otro lado, pensaba que tal vez había llegado el momento de que su mejor amiga supiera porque se había ido y dejara de sentirse culpable.
- Lo seguí por todas partes preguntándole por su hermano, quería verlo, pero él se burlaba de Charlie porque yo era demasiado pequeña, sin embargo, logré averiguar muchas cosas sobre él. Le pedí que nos escribiéramos y accedió, así que a veces Bill me traía las cartas de su hermano.
Ginny Weasley observaba a su cuñada, ni siquiera sabía que había tenido una relación de años por correspondencia con su hermano y pensaba en cuanto más no sabría.
Isabella, leyendo su mente continúo con el relato.
- No eres la única que tiene un talento especial de nacimiento, ya debes saber lo que es la Oclumancia- Al decir esto una sonrisa leve apareció en sus ojos, Ginny, ahora podía recordar como su amiga le adivinaba las ideas cuando niñas, y le decía a ella lo que sus profesores pensaban, sobre todo cuando querían pedir permiso para ir a algún lugar.
- ¿Qué es exactamente lo que puedes hacer? - preguntó de manera firme, mostrando por primera vez frente a su amiga el carácter que había forjado durante todos estos años como capitana en las grandes ligas de quiddich.
Regresar al índiceCapítulo 2 by Trysha
Isabella comenzó a recordar.
Estaba en su primera clase de pociones cuando el profesor Snape la quedó mirando fijamente, una mirada de desprecio que a ella le molestó, y sin dudarlo ni un segundo, hizo contacto con esos fríos ojos negros, pero su irrupción no paso desapercibida al docente, simplemente lo había tomado por sorpresa:
- ESO NO SE HACE- le dijo jalándola por un brazo.
- No te alteres Quejicus - respondió desafiante.
Ese incidente le valió un pase directo a la oficina del director. Aquí vió por primera vez de cerca esos ojos azules detrás de lentes en forma de media luna y sintió su escaneo.
- Tienes un don muy especial, y tú ya sabes que lo tienes- dijo con una voz suave y tranquila, Isabella ciertamente esperaba otra clase de reacción de parte del director, sobre todo por cómo reaccionó el profesor. Cursos gratis en Youtube
- Debe ser castigada, ella no puede simplemente… entrar… así nada más…
- Severus - lo llamó el Director - Está bien, y ahora Severus, déjanos por favor -
A regañadientes, el profesor de pociones abandonó la habitación, no sin antes dar una última mirada de odio y desprecio a la alumna que lo miraba marcharse con igual gesto.
- Tu don, mi niña, no es común, aunque no se sabe ciertamente cuanta gente puede hacer lo que tú, debo decir que bien usado puede resultar muy útil, sin embargo, es poco común ver personas tan jóvenes con este nivel de Legetimancia, Dumbledore decía esto sintiendo como la niña sin el menor respeto revisaba cuantos recuerdos encontraba a su paso.
Sonriendo le cerró el paso, lo que hizo que la joven se tambaleara en su silla y se concentrara en lo que decía el director.
- Verás, dijo de nuevo, aquí estas para aprender, y si usas tu don como lo has hecho hoy, no aprenderás, pues ya veo que estas acostumbrada a buscar respuestas por “tus propios medios”.
- Isabella por primera vez se sonrojaba.
- Hay un riesgo en lo que haces, le replicó el director, y haciendo contacto con sus ojos procedió a mostrarle todos los recuerdos que le había sacado mientras ella deambulaba en su mente.
- Oh, ya veo- contesto consternada por primera vez la niña.
- Ahora, te explicaré lo que haremos, tomaras clases de oclumancia, son para evitar que otros entren a tu mente, y si, Severus será tu profesor.
Isabella sabía ahora que Dumbledore tenía su mismo don, podía leer la mente de las personas con solo mirarlas, antes de irse, miró al director por última vez con una última pregunta en mente, a lo que él respondió al instante,
- No, leer lo que la gente piensa con solo tocarlos no es nada común, y ciertamente no creo que sea algo bueno, te hará sentirte sola.
- Eso ya lo sé, dijo Isabella con los ojos tristes, mi padre no me quiere, él solo piensa en mi hermana.
El director suspiro hondo y luego trató de hacerle a entender a la pequeña que lo que ella percibía era solo parte de la realidad, con los años Isabella lo comprendería, pero muchas cosas más tendrían que ocurrir, antes de que ella dejara de sentir que todos la abandonaban.
Este don ciertamente fue útil durante su primer año, ya que pese a las recomendaciones del director, constantemente lo utilizaba en clases, solo la clase de pociones resultaba más difícil, pues el profesor era excelente en oclumancia, cosa que ella también había aprendido gracias a él y había aprendido a usarlo sobre todo en su presencia, sin embargo, lo que profesor no sabía era que la chica también podía leer la mente por medio del tacto. Estas clases eran una guerra entre ella y profesor, guerra en la que constantemente perdía puntos y se ganaba castigos.
Sin embargo, esto no fue del todo malo, ya que en ellos conoció a los hermanos Creevey, castigados por apoyar a Potter en el Torneo de los Tres Magos, eran muy simpáticos y honestos por lo que se llevaron de maravillas, además Colin no era nada feo, ambos eran fanáticos de Harry Potter, lo seguían y mantenían al día una bitácora sobre sus actividades, cuando salió su nombre del cáliz de fuego, ellos estaban extasiados.
A Isabella la verdad le daba un poco lo mismo, claro que como toda hija de familia de magos había escuchado hablar de él, al conocerlo le parecía un chico muy normal.
Sin embargo cuando la fecha de la primera prueba se acercaba, Colin y su hermano Dennis le habían suplicado tan desesperadamente que los ayudara a seguir a Harry Potter que cuando leyó en la mente del héroe de sus amigos que pensaba en salir a ver Hagrid, no lo dudo y comenzó a seguirlo.
Regresar al índiceCapítulo 3 by Trysha
Sin embargo cuando la fecha de la primera prueba se acercaba, Colin y su hermano Dennis le habían suplicado tan desesperadamente que los ayudara a seguir a Harry Potter que cuando leyó en la mente del héroe de sus amigos que pensaba en salir a ver Hagrid, no lo dudo y comenzó a seguirlo.
Lo que vio ese día, o más bien lo que vivió, cambio su vida para siempre.
Llevaban cerca de 20 minutos caminado por el bosque prohibido, cuando escuchó los primeros sonidos que la aterrorizaron, fue muy difícil no ser vista, sin embargo los dragones fueron una increíble distracción.
Era la primera vez en su vida que veía una criatura mágica tan grande, en clase con Hagrid veían gusarapos del río, y estos eran… dragones de verdad.
Sin siquiera pensarlo caminó hacia ellos, observando un hermoso Galés Verde, como pudo trepó a su jaula, a lo lejos un Cola Cuerno Húngaro provocaba gran escándalo atrayendo la atención de los cuidadores, ella ya estaba sobre la jaula, la verdad preguntándose para qué demonios se había subido, cuando la bestia notó su presencia, una ráfaga de fuego pasó peligrosamente cerca, cuando su puntiaguda cola golpeó la superficie donde ella estaba parada, nunca supo si gritó o no, solo sintió que caía y luego unos fuertes brazos sujetándola.
- No debes estar aquí, dijo un hombre secamente- te asusto mi niñita hermosa. Tranquila no te hará daño.
- Un poco - contestó sonriente- solo para darse cuenta de que en realidad no le hablaban a ella, el joven le hablaba al dragón.
- Medio indignada y ciertamente herida en su orgullo, se dispuso a marcharse cuando vio que la mano del joven estaba herida, estiró la suya para envolvérsela, y lo tocó, en ese momento una ráfaga de pensamientos llegaron a su mente, cuestionamientos sobre el estrés del animal, lo injusto de la jaula, las horas de viaje, la comida, lo mal que se sentiría si le quitaban un huevo, esto la impresionó a sobre manera, nunca había conocido a alguien que se emocionara tanto con una bestia.
- Sabes, le dijo en tono sarcástico la niña, no creo que se haya asustado, pero si fue así lo siento.
Miró los profundos ojos castaños, su piel cubierta de pecas, tantas que parecía moreno y se sumergió en sus pensamientos buscando la manera de molestarlo, recorrió su vida escolar, lo vio como capitán del equipo de Quidditch, como prefecto, como cuidador de dragones, y no encontró ni un mal sentimiento, ni siquiera cuando su novia terminó con él, no había nada malo a la vista, esto la sorprendió, nunca había conocido a alguien a quien no pudiera encontrarle sentimientos negativos.
Él la miraba sorprendido, sabía que no era feo, pero no entendía que le pasaba a la chica, de repente dijo- el dragón debió afectarte, y tomándola en sus brazos la llevó a la enfermería.
Fue muy amable con ella, y hasta vino a verla al otro día, pidiendo no revelar nada sobre la prueba.
- No hay problema- solo he hablado con tu hermana y no me cree ...
Charlie le habló de su familia, de todos sus hermanos, mientras Isabella observaba divertida los recuerdos de él a media que iban apareciendo en la mente del hombre, mas de alguna vez se sorprendió pensando en él o yendo a buscarlo para preguntarle cualquier idiotez, tras la prueba de los dragones, Charlie se despidió y se fue. - Lastima, me caía bien - pensó para sí misma. Luego comenzó a ver todo más gris, a su alrededor todos parecían mentir, engañar y no ser auténticos, mas de alguna vez se sorprendió mirando los ojos de Ginebra Weasley, era la que más se parecía a Charlie de todos sus hermanos, aunque los gemelos tenían un aire cuando sonreían. Un día mientras observaba a Ginny esta no aguanto más y explotó:
-¿Por qué demonios me miras tanto?- gritó la pelirroja.
- Me recuerdas a alguien- dijo simplemente Isabella y una mirada triste apareció en su rostro.
Ginny, que sufría también por amor se acerco a ella y la abrazó, Isabella pudo darse cuenta que la chica era tan sincera como su hermano, pero que al igual que ella sufría por un amor que consideraba imposible.
-¿Te enamoraste de uno de mis hermanos? - preguntó con sonrisa triste, la novata solo asintió sorprendiéndose del movimiento de su propia cabeza, en ese momento ya no le quedaron dudas, se estaba enamorando de Charlie Weasley, pero también sabía, que ella no significaba nada para él, muchas chicas, como Ginny suponían que no eran correspondidas, pero ella tenía la certeza de que a él solo le interesaban los dragones.
A partir de ese momento su amistad con Ginny creció, claro que la pelirroja pensaba que estaba enamorada de Ron, por eso para el baile, le había dicho que lo invitara, fue ahí cuando Bell, como había comenzado a llamarla, la sacó de su error.
- No es Ron el que me gusta- él tiene ojos azules.
- Ginny miró más triste aun a su nueva amiga - los gemelos son casi inalcanzables, son demasiado mayores. Le explicó.
- George no opina igual, para él el amor no tiene edad, contesto taciturna Isabella.
Ginny ahora se daba cuenta de que su amiga era la única que nunca los había confundido, cosa que exasperaba a Fred, él que le había pedido a Ginny que averiguara como lo hacía.
Ginny había conversado sobre las diferencias entre los gemelos con ella, y siempre obtenía la misma respuesta, no sienten lo mismo y piensan diferente.
Ahora sin embargo pensaba que todo se debía a que estaba enamorada de uno de ellos. Isabella leyendo su mente simplemente dijo:
- Es tu otro hermano de ojos cafés. Y comenzó a llorar.
- Fred, es bueno un poco ya sabes, superficial- decía Ginny tratando de consolarla.
- El otro, dijo Isabella llorando más.
- Yo solo tengo dos hermanos con ojos como los míos y uno con ojos azules.
- No- respondió automáticamente Isabella- Tres con ojos cafés y dos con ojos azules, respondió mientras miraba la nieve caer afuera de la ventana.
- ¡Estás loca!- fue la respuesta de Ginny, el tiene como 20 años y tú 11 y… y…y él está en Rumania y ….. y no lo conoces- dijo finalmente.
- Si lo conozco, fue su respuesta para luego salir corriendo a todo llorar.
Ginny le escribió una carta a su hermano reclamándole por jugar con los sentimientos de una niña pequeña, y este en respuesta le escribió una carta de disculpas a Isabella, así comenzó una relación por correspondencia que duraría varios años.
Regresar al índiceDisclaimer: All publicly recognizable characters and settings are the property of their respective owners. The original characters and plot are the property of the author. No money is being made from this work. No copyright infringement is intended.Esta historia archivada en https://www.fanfic.es/viewstory.php?sid=27154
Isabella la Joven Auror by Trysha
Isabella Weasley es un personaje de mi autoría, ella compartió parte de su edad escolar con Harry Potter, siendo mejor amiga de Ginny en esta etapa, aqui
fanfic
es
https://fanfic.es/static/images/fanfic-isabella-la-joven-auror-by-trysha-947-0.jpg
2024-10-29
Si crees que alguno de los contenidos (texto, imagenes o multimedia) en esta página infringe tus derechos relativos a propiedad intelectual, marcas registradas o cualquier otro de tus derechos, por favor ponte en contacto con nosotros en el mail [email protected] y retiraremos este contenido inmediatamente