UNA SHINIGAMI ENAMORADA by Shirane

JJ es una shinigami que pierde su cuaderno en el mundo humano por culpa de una jugarreta de otro shinigami, Beyond. Cuando lo encuentra y está a punto de alcanzarlo, alguien se adelanta, un joven de ojos azules y pelo rubio de nombre Mello. JJ no tendrá más remedio que quedarse con él hasta que este decida devolvérselo. Una historia llena de humor, drama y romance.

Shirane: Aqui les traigo un fic que se me ha ocurrido al estar viendo la serie de Death Note. Espero que os guste ^^

Mello: No lo dejaras a medio como el otro ¿verdad? ¬¬

Shirane: ¡ya explique por que no segui escribiendo! Ò.Ó

Ademas ahora ya estoy de vacaciones y tengo todo el tiempo del mundo ¿de que te quejas? 

Mello: Bah ¬¬

JJ: Shirane, dejalo. Tú escribe cuando puedas y sin prisas ^^

Shirane: gracias JJ tú si que eres una buena amiga ^^

Mello: (Mujeres ¬¬')

Shirane: Bueno no os entretengo más, aqui esta el fic ^^

Nota: en esta historia lo sucedido en la serie Death Note no pasa, es decir, lo de Light siendo Kira y todo eso. Esto cambiara cosas de la historia como, la razon de la cicatriz de Mello, entre otras cosas...

Y nada mas, disfrutad del fic ^^ 

Shirane: El primer capitulo que os guste ^^

Mello: Te repites mas que un disco rayado ¬¬

Shirane: ¡Y tú siempre eres un borde! Ò.Ó#

Mello: ¿¡Qué has dicho!? Ò.Ó#

(Miradas amenazantes)

JJ: ¡Chicos no os peleeis!

Shirane y Mello: ¡Hum! (desviando miradas con los brazos cruzados)

JJ: Aah siempre igual -.-' 

Bueno aqui esta el capitulo, un saludo ^^

NOTA: El nombre de JJ se pronuncia como se pronunciaria en japones (YiYi) porque la J en japones la pronuncia como Y

-¡No la encuentro, no la encuentro! – gritaba de un lado para otro una chica de pelo corto negro, algo alborotado, piel blanca y ojos negros con grandes pupilas que dejaban ver un pequeño círculo azul a su alrededor

Llevaba una tela negra totalmente rasgada que le tapaba únicamente los pechos, pero que se conectaba por un pequeño hilo con una parte de abajo igualmente rasgada acabando en una punta que llegaba un poco más arriba de las rodillas. En los brazos llevaba vendas de color negro, en el brazo derecho las vendas llegaban hasta la muñeca y en izquierdo llegaban hasta el hombro. 

Se encontraba en un lugar sombrío y algo tenebroso, siendo lo único que había a su alrededor era arena y rocas. Y es que ese mundo era donde habitaban los shinigamis, también llamados mensajeros de la muerte.

-¿Es esto lo que buscas JJ? – dijo alguien detrás de la alborotada chica.

Era un chico de pelo negro parecido al de la chica con ojos rojos. Llevaba un chaleco negro largo, rasgado por abajo, una camiseta negra con unos pantalones también negros. Su cuerpo estaba totalmente lleno de cadenas por todas partes. Su cara mostraba una sonrisa maliciosa y en su mano tenía el objeto que todo shinigami debe tener, y es lo que les da la capacidad de matar a todo aquel que quieran y por tanto vivir cuanto tiempo quieran: Una death note

-¡Beyond, desgraciado! ¡Sabía que habías sido tú! ¡Dámela! – le exigió JJ extendiendo la mano y con cara de pocos amigos

-¡Antes tendrás que cogerme! – de la espalda de Beyond aparecieron dos alas enormes de murciélago y este salió volando. JJ lo observo y de la misma manera, de su espalda brotaron dos alas con plumas negras y voló detrás de él.

Se estuvieron persiguiendo un buen rato hasta que Beyond se paró justo delante de uno de los portales al mundo humano. Al poco llego JJ

-¡Te lo advierto Beyond! – Grito JJ - ¡Devuélveme mi death note!

-¿La quieres? – Beyond tiro la death note por el portal – Pues ve a por ella

-¡Ah! – JJ ni siquiera se molestó en insultar a Beyond y fue detrás de su death note. Durante el trayecto estuvo a punto de cogerla pero se le resbalo de las manos - ¡Mierda!

Antes de llegar al mundo humano la perdió de vista y acelero el vuelo, pero ya había pasado totalmente y ahora estaba en una ciudad del mundo humano. Era una ciudad bastante grande y JJ llego a aterrizar en medio de la carretera. Uno de los coches la iba a atropellar pero este paso de largo y JJ no sufrió ningún rasguño, es más, el coche la atravesó y no se paró, ni tampoco la gente que caminaba por la calle, era invisible para todos. JJ ni siquiera se asustó o se molestó, ya que al ser una shinigami, nada de ese mundo la podía matar, ni ser atropellada, ni las balas, ni siquiera una bomba nuclear.

-¡Maldito Beyond! ¡Cuando lo pille se va a enterar! – maldijo JJ.

Alzo el vuelo, desde el aire aunque no tan lejos del suelo le sería más fácil encontrar su death note. Debía encontrarla con rapidez, porque aunque ella fuera invisible para los humanos, su death note no lo era y no se podía imaginar lo que pasaría si algún humano la encontrara y se quedara con ella.

Tras un buen rato buscándola sin dar con ella, se dio por vencida y se metió en un callejón y se sentó encima de unos contenedores que había ahí con la cara de pez globo y abrazando sus rodillas

-Genial… ¿Y ahora qué hago? El Rey Shinigami no creo que me quiera dar una nueva. Aunque si le digo que ha sido culpa de Beyond lo mismo le quita a él la suya y me la da a mí. ¿Y por qué voy a ir a decirle al Rey Shinigami? Al igual que él me ha quitado la mía, le quito yo la suya. – mostro una sonrisa algo picarona

Se levantó e iba a alzar el vuelo nuevamente cuando vio algo que le llamo la atención. Al final de ese callejón que se conectaba con otra calle más adelante vio un cuaderno negro en el suelo.

-Puede ser… - fue veloz a ver si era lo que pensaba, y efectivamente lo era, ya que vio que entre el negro del cuaderno había unas letras en blanco que decían “death note” - ¡Mi cuaderno!

Se lanzó aún más veloz y volando a cogerlo y cuando estiro la mano para cogerlo una segunda mano fue más rápida que ella y lo cogió.

-¿Eh? – con los ojos abiertos como platos siguió con la mirada el brazo de la persona que había cogido su cuaderno.

Vio a un chico de ojos azules claros, pelo rubio y largo hasta los hombros y con algo que le llamo la atención, una quemadura en el lado izquierdo de la cara. Vestía con una chaqueta negra larga hasta un poco más debajo de los codos con pelo al final y una capucha blanca, unos pantalones negros y unos zapatos de punta también negros, llevaba una cruz roja y negra colgando del cuello enganchada a una cadena hecha con pequeñas bolas rojas y negras

Ambos se quedaron por un momento mirándose con cara de sorpresa sin decir nada y sin ni siquiera moverse, hasta que:

-¡Aaaaaaaah! –grito JJ lo que hizo que el chico se asustara y se cayera de culo al suelo

-¡Debería ser yo el que gritara! – le grito el chico por el hecho de que JJ estaba flotando en el aire, además de tener las alas fuera - ¿¡Qué clase de bicho raro eres tú!?

-¿¡Bicho raro!? – JJ pareció molestarse por el comentario – ¡No soy ningún bicho raro, soy una shinigami!

-¿Una shinigami? – repitió el chico levantándose del suelo e inspeccionando con la mirada a JJ lo que hizo que la shinigami se sintiera un poco incomoda

-¿Se… se puede saber que miras? – le dijo tapándose con los brazos y un poco sonrojada, y escondiendo las alas aunque seguía flotando en el aire

-Hum, no me imaginaba que los shinigamis fueran tan… humanos – dijo el chico sacando una tableta de chocolate y dándole un mordisco – aunque nunca me lo plantee, después de todo los shinigami son solo un cuento de viejas…

-Bueno… - salto JJ evadiendo la penetrante mirada del rubio - ¿Me devuelves mi cuaderno?

El chico se fijó en el cuaderno que aún seguía llevando en la mano.

-¿Es tuyo este cuaderno que pone death note? – le pregunto con una sonrisa que desconcertó un poco a JJ

-Sí, lo necesito – JJ frunció un poco el ceño, no le gustaba la actitud que aquel rubio estaba tomando

-¿Para qué lo necesitas?

JJ vio las intenciones del chico, después de todo, tenía un don y era que con mirar a una persona sabía sus intenciones debido a los gestos que hacía. En otras palabras, sabía leer el lenguaje corporal. La mirada penetrante y la sonrisa ya le decían a JJ que algo tenía planeado el chico con respecto al cuaderno y no iba a ser nada bueno, al menos para ella

-Con el puedes matar a quien quieras con solo escribir su nombre en él… - respondió con seriedad y bastante decidida

El chico abrió un poco más los ojos en señal de asombro

-¿En serio? – dijo mirando el cuaderno

-No es algo que un humano deba tener, es un arma demasiado peligrosa, así que devuélvemelo – JJ se acercó a coger el cuaderno pero el chico la esquivo

-No… - dijo firme

-¿¡Qué!?

-Creo que me la quedare, después de todo he sido yo quien la ha encontrado – dijo con tono burlón

-¡Pero es mío!

-Si no lo hubieras dejado tirado no tendrías ahora este problema

-¡No lo he dejado tirado, me lo han tirado! – le grito JJ recordando la jugarreta de Beyond el cual debía estar partiéndose de risa en el mundo shinigami y más si estaba viendo la escena desde uno de los portales. 

-Pues no debes ser una buena shinigami si dejas que otro te quite el cuaderno con tanta facilidad y te lo tire por ahí – JJ se sintió algo avergonzada, la verdad es que tenía razón, solo perdió un segundo de vista el cuaderno, lo que Beyond aprovecho para quitárselo.

-¡Ya es suficiente! ¡Devuélvemelo o te…!

-¿O me qué…? – dijo desafiante el chico lo que JJ se hecho hacia atrás – No tienes tu preciado cuaderno para matarme…

-He, pero tú tampoco puedes matarme a mí… - JJ intento intimidar al chico, intentando no mostrar que estaba en un callejón sin salida, ya que los shinigamis no podían matar de otra forma que no fuera con el cuaderno, lo tenían prohibido

-Hum… - el chico, que aún seguía comiéndose esa tableta de chocolate se la dejo en la boca y del mismo bolsillo saco un mechero que prendió y lo acerco al cuaderno asustando a JJ – Tal vez no pueda matarte, pero eso no impide que te tenga contra la espada y la pared

-Tsk… - JJ miro con rabia a aquel chico, sabia jugar bien, y no podía permitir perder el cuaderno de una forma en la que fuera imposible recuperarlo, además por su forma de mirarla sabía que no se estaba echando un farol – Esta bien, está bien… – se rindió, al menos eso era mejor que quemar el cuaderno – Pero ahora que te has convertido en el propietario del cuaderno deberás acatar las normas que el conlleva

-He, así me gusta – el chico apago el mechero y lo volvió a guardar, aunque seguía agarrando el cuaderno con fuerza por si acaso – Bien ¿y cual son esas normas?

-Aah… - suspiro JJ – Vale, ya que yo soy la shinigami dueña del cuaderno y tú el humano dueño del cuaderno, deberé permanecer contigo todo el tiempo hasta que decidas renunciar a él, en ese caso el cuaderno volverá a ser mío

-Vale, no hay problema – respondió el rubio

-Y segundo, nadie podrá verme a no ser que toque el cuaderno como tú has hecho, pero eso no los convierte en propietarios, solo es propietario el primer humano que lo toca.

-Está bien… - el chico se guardó el cuaderno dentro del pantalón por detrás – Si eso es todo, vamos

-¿Eh?

-¿No dices que tienes que ir conmigo todo el tiempo? Pues vamos – Y el chico se puso a caminar saliendo del callejón, seguido por JJ aun con el ceño fruncido y flotando a dos pasos detrás de él – Por cierto ¿Cuál es tu nombre?

-JJ… – respondió JJ con el tono más serio que pudo

-¿JJ? Vaya un nombre más raro, aunque es normal para un shinigami – Se paró a mirar una última vez a la shinigami con una sonrisa maliciosa – Tú llámame Mello

-“¿Mello? Pero ese no es el nombre que yo veo…” - dijo JJ al ver encima de su cabeza un nombre distinto al que le había dicho, capacidad de todo shinigami, y debajo del nombre una serie de números que hizo que JJ abriera un poco los ojos – “Este chico… su esperanza de vida…”

-¿Qué miras? – le saco de sus pensamientos Mello, aunque en voz baja ya que estaban en mitad de la calle y si alguien le veía hablando solo le tomarían por loco, aunque tampoco le importaba mucho

-Ah, nada, nada – Mello se dio la vuelta y camino hasta una moto negra y cogiendo el casco que había en el maletero levantando el asiento se lo puso y se montó en ella

-¿Serás capaz de seguirme? – le pregunto

-Por favor… - dijo sarcásticamente JJ sacando las alas

-Jeje – se rio Mello y poniendo la moto en marcha salió a la carretera lo más rápido que pudo, y a su lado JJ volando a la misma velocidad a la que él iba

Por su parte JJ miro de reojo a Mello y volvió a ver su esperanza de vida y sonrió un poco para que el otro no se diera cuenta, ya que no podía ver si la estaba mirando a ella o a la carretera por el cristal negro del casco.

-“Lo único bueno de esto… es que no voy a tener que esperar mucho a tener mi cuaderno de vuelta…”

Shirane: Y hasta aqui el primer capitulo ^^

Mello: ¡Un momento! ¿Que le pasa a mi esperanza de vida? O.O

JJ: jiji, es un se-cre-to :P

Mello: maldita... Ò.Ó#

Shirane: Os espero en el segundo capitulo (mirando de reojo a JJ y Mello) ^^'

Shirane: Llega el capitulo 2 ^^

Mello: ¿Sabre que coño pasa con mi esperanza de vida?

Shirane: Aaaaah, tendras que leerlo para saberlo :P

Mello: Puedo hacerte hablar facilmente (apuntando a Shirane con una pistola)

Shirane: Espera, espera, no te precipites... ¡¡¡JJ!!! TT.TT(sale corriendo)

Mello: ¡¡Vuelve aquí!!

Shirane: ¡¡Disfrutad del capitulo, mientras yo corro por mi vida :'D

Tras una media hora de camino llegaron hasta un edificio en las afueras de la ciudad que parecía bastante deteriorado. Mello se paró delante de este y saco una especie de mando pequeño, le dio a un botón y una compuerta se abrió. JJ se sorprendió de la tecnología y entro detrás de Mello. El interior era un garaje enorme. Nadie hubiera pensado al ver desde fuera que el sitio fuera tan grande. Había varios coches y motos aparcados, Mello dejo su moto en una de las plazas.

-¿Aquí es donde vives? – le pregunto JJ inspeccionando el lugar

-Esto solo es el garaje – Mello se encamino hasta una puerta que tenía al lado un monitor con teclas, pulso unas cuantas y tras un pitido la puerta se abrió. A JJ le parecieron demasiadas seguridades y ya comenzó a pensar al ver los coches que Mello pertenecía a algún tipo de organización, y que ese era como su cuartel general

Subieron unas escaleras que los llevaron hasta lo que era como un comedor enorme. Con varios sofás alrededor de una mesa baja de cristal y cuadros bastante raros decorando las paredes. Delante de ellos un enorme pasillo que se bifurcaba a los lados. Mello iba directo al pasillo cuando:

-¡Ey Mello! – un pelirrojo con gafas moteras y camisa a rayas negra y blanca se asomó por encima de uno de los sofás. Llevaba un cigarrillo en la boca y una PSP en la mano - ¿Dónde te habías metido tío?

-Eso no te importa Matt – le contesto Mello

-Jajaja, tan amable como siempre.

-¿Han vuelto ya Ross y los demás del encargo que les mande?

-Aun no… – dijo volviendo a poner la vista en la PSP

-Avisame cuando vuelvan – exclamo Mello mientras caminaba hacia el pasillo

-Recibido jefe – dijo Matt levantando el pulgar

-“¿Jefe? Debe ser el líder de esta especie de organización” – penso JJ – “Aunque parece muy joven”

Mientras caminaban JJ miraba hacia todos los lados del pasillo. Le parecían todas las puertas iguales y seguramente si intentaba irse por su cuenta se perdería pero como nadie la podía ver en ese momento le daba igual irse a inspeccionar el sitio, pero tampoco quería perder de vista a Mello, aunque más que perderle de vista a él sería no perder de vista su cuaderno. Llegaron hasta el final del pasillo donde había una solitaria puerta al fondo de este. Al llegar y que Mello la abriera, la habitación era bastante oscura, las cortinas estaban echadas, pero algo de luz se colaba, pudiendo ver en la izquierda un escritorio con un ordenador portátil y varios cajones, en frente de la ventana un sillón de cuero negro y la cama al lado derecho de la habitación con una colcha de pelo color negro que daba gusto al tacto y a su lado una mesilla de noche con una lámpara y un tableta de chocolate que Mello cogió, se sentó en el sillón y se la empezó a comer. Entre el escritorio y la pared de delante había una puerta más que estaba cerrada.

JJ sintió curiosidad y entro en ella aunque no tuvo ni que coger el pomo, solo atravesó la puerta. Era un cuarto de baño bastante lujoso, y a diferencia de la habitación era totalmente blanco con una bañera bastante grande con un grifo de ducha, un wáter con lavabo para las manos y un videl. JJ salió otra vez a la habitación y Mello estaba en el mismo sitio de antes solo que esta vez había abierto las cortinas y abierto la ventana iluminando un poco más la habitación pero no mucho ya que el sol se estaba empezando a esconder.  

Se asomó y vio el paisaje desértico que había alrededor. Era igual a su mundo pero aquella estampa le fascino, porque podía ver en el horizonte como el sol se ocultaba y el cielo se tornaba de varios colores, desde amarillo hasta naranja y rojo, algo que en el mundo shinigami era imposible ver, pues siempre era de noche.

-Muy bien shinigami…

-¡Mi nombre no es shinigami! ¡Es JJ! – Se giró enfadada a mirarle, le fastidio la hermosa vista que tenía - ¡Si me has preguntado mi nombre será para llamarme por el! ¿No?

-Ja – Mello mostro una sonrisa maliciosa mientras le daba otro bocado al chocolate – Te olvidas que tengo tu preciado cuaderno en mis manos, así que o empiezas a comportarte mejor o ya puedes despedirte del cuaderno.

-Glup… - trago JJ, aunque puso cara de pez de globo y desvió la mirad cruzándose de brazos y dejándose caer en la cama - ¿Y cómo quieres que me comporte para que mi cuaderno no sufra daño?

-Para empezar, puesto que tú eres la shinigami del cuaderno y el cuaderno ahora está en mí poder deberás tratarme como tu amo

-¿¡Perdona!? ¡¡Estas de coña!! ¿Verdad? – JJ se puso de pie en la cama con los hombros encogidos Innovacion y creatividad

-No, harás todo lo que yo te diga, sin rechistar y sin una queja o ya sabes lo que le espera a tu cuaderno – se metió la mano en el bolsillo y asomo el mechero de nuevo

-¡¡Vale, vale, vale!! ¡Lo entiendo! – le grito JJ antes de que terminara de sacarlo – Aah, muy bien. Hare lo que tú quieras…

-Je, eso está mejor… - Mello guardo el mechero – Y ahora, quiero que me expliques las reglas del cuaderno, al menos las mas importantes

JJ miro con recelo a Mello, estaba empezando a odiarlo cada vez más, pero de nuevo se fijó en su esperanza de vida y pensó:

-“Al menos no tendré que aguantar esto mucho tiempo”

JJ se sentó y cogió aire pues la explicación iba a ser larga, pero tampoco iba decirle todas las reglas, al menos las que podían perjudicarla

-Para matar a alguien con la death note solo tienes que escribir su nombre completo al mismo tiempo que tienes en mente su cara, si te falta alguna de las dos cosas no surtirá efecto. Si no especificas la causa de la muerte la persona morirá de un ataque al corazón a los 40 segundos de escribir su nombre. La causa de la muerte no se llevara a cabo si es una acción imposible para un humano.

-¿Se puede escribir con cualquier cosa?

-Sí, siempre que sea entendible

-¿Hay alguna forma de que pueda perder la death note?

-“Va a lo que le interesa, es listo el desgraciado” – pensó JJ – Como cualquier cosa de este mundo pueden robártela o que la pierdas, en ese caso tendrás un plazo para encontrarla. Si ese plazo se gasta dejaras de ser su dueño. Si te matan y te la roban el propietario pasara a ser tu asesino

-Hum ya veo… - se quedó pensativo un rato – En ese caso este será nuestro pequeño secreto, no le diré a nadie del cuaderno ni dejare que nadie lo toque. Después de todo en este sitio es mejor no fiarse de la gente

JJ se confundió por lo dicho por Mello aunque se hacía una idea. El estar lejos de la ciudad, escondidos y con tantas medidas de seguridad solo podía darle unas cuantas opciones y se decidió por la primera:

-¿Eres de la mafia? – dijo JJ algo convencida ante la sorpresa de Mello

-¿Cómo lo has sabido?

-Por tu forma de hablar y el lugar, más que nada…

-Vaya no solo eres una cara bonita, tan bien tienes cerebro – JJ se sintió por una parte halagada por lo de cara bonita pero ofendida por lo segundo pero no dijo nada solo fulmino a Mello con la mirada frunciendo el ceño tanto como pudo – Tal vez seas útil después de todo…

-¿Pensabas dejarme aquí sin hacer nada que no sea seguirte como un perrito faldero? Para tu información puedo irme a donde quiera y cuando quiera

-¿Seguro? Si te vas no podrás recuperarlo – dijo Mello enseñándole la death note y de nuevo con una sonrisa burlona

-¿Sabías que eres despreciable?

-Gracias… - Mello soltó una ligera risilla que saco más de quicio a JJ

Se quedaron en silencio el resto de tiempo. JJ no dejaba de ver por la ventana, miraba al cielo con admiración a las estrellas y la luna. Cierto que había visto esas cosas desde los portales del mundo shinigami pero no era lo mismo que verlo en persona. Soplaba una ligera brisa nocturna fresca que al sentirla en la cara JJ cerró los ojos para disfrutar mejor de ella y sonrió. Por un momento se olvidó de que Mello estaba a su lado, quien estaba verificando cosas en el ordenador. Por un momento se giró a ver a JJ y el ver esa sonrisa, adornada con el viento meciendo su pelo negro le dejo anonadado, y no puedo evitar dejar de mirarla.

Le saco de su trance como la puerta se abrió de golpe

-¡Mello! – grito Matt desde la puerta

-¿¡Es que no te han enseñado a llamar gilipollas!? – A Mello le molesto más el hecho de que le fastidiaran la visión que tenia que el hecho de que Matt entrara sin avisar a su habitación

-Oh, vaya perdona… ¿Estabas ocupado? – dijo Matt encogido de hombros

-¡Sí, lo estaba idiota! – tras eso Mello resoplo tratando de clamarse

-“Vaya un genio” – pensó JJ viendo la escena

-Venía a decirte que Ross y los demás han vuelto ya

-Vale, en seguida voy… - dijo Mello más calmado

Matt cerró la puerta y se oyeron los pasos alejarse

-¿Vienes o te quedas? – Le pregunto a JJ quien no se esperaba para nada que le diera opción y lo miro extrañada - ¿De qué te sorprendes? Que tengas que estar conmigo puede ser en el mismo edificio aunque no estés a mi lado ¿no?

-S-Sí…

-Pues eso ¿vienes o te quedas? – pregunto algo impaciente y con un tono casi de orden lo que disgusto a JJ

-No tengo interés en saber cosas de mafiosos – dijo sin mirarle y volviéndose a cruzar de brazos

-Como quieras – y Mello salió pegando un fuerte portazo que hizo que JJ cerrara los ojos fuerte en el momento del golpe

Al salir Mello se quedó un rato en la puerta con una cara de desconcierto pero con el ceño fruncido

-“¿Qué es lo que me acaba de pasar con esa shinigami? ¿Por qué me he mosqueado tanto de que no pudiera seguir mirándola?” – pensó Mello – “Bah, ¿Qué más da? Después de todo se la ve una mocosa” – Y se puso a caminar por el largo pasillo dirección al gran comedor de antes, cuando se llevó la mano al bolsillo y no noto nada - ¡Mierda, me he dejado el chocolate en la mesilla!

Por su parte JJ seguía en la cama sentada mirando desde ahí el paisaje nocturno. Noto un ligero olor distinto. Era un olor dulce que lo noto delicioso. Vio una tableta de chocolate encima de la mesa medio empezada, se acercó a ella y la olio

-“Huele como él… no es nada desagradable, al contrario, es delicioso” – JJ abrió los ojos de golpe y volvió a dejar la tableta – “¿pero qué tonterías estoy pensando? ¿Cómo puedo pensar que algo de él es delicioso, si no es más que un humano borde y arrogante ¿Qué me está pasando con ese humano”

Así se tumbó en la cama, y noto el suave tacto de la colcha de pelo, produciéndole una sensación de paz hasta que noto como sus parpados le pesaban hasta que los cerro por completo.

Shirane: ¿Que os ha parecido, chicos? 

JJ: ¿Me... me estabas mirando? O//O

Mello: I-idiota no te creas la gran cosa ¬//¬

Matt: Pues menudo cabreo te cogiste por no poder seguir enbobado mirandola ¬.¬

Mello: ¿¡¡Tú que coñ* haces aquí!!? Ò.Ó#

Matt: Shirane me ha invitado ^^

Mello: Shiiiraneee... (ganas de matar aumentando)

Shirane: Jeje n.nU 

Bu-bueno y hasta aqui el segundo capitulo ^^' 

Espero seguir viva para escirbir un tercer capitulo (mirando de reojo a Mello quien esta acariciando la pistola)

Mello: Yo no contaria con ello...

Shirane: Buaaaaaah!!! TT.TT

(Shirane escondida)

JJ: ¿Shirane? ¿Que haces aqui? oO

Shirane: Ssssh, me escondo de Mello.He subido n nuevo video y me da miedo decirlo en alto por si me mata

JJ: Pero que tonterias dices XD

¿Como va a matarme? Ademas si lo intenta antes tendrá que pasar por encima de mi

Shirane: Fyu, gracias JJ ^^

En ese caso tomad aqui os dejo el tercer capitulo

JJ: Que lo disfruteis ^^

Cuando Mello llego al comedor ya había varios hombres sentados. Uno era bastante fuerte de apariencia, calvo pero con perilla llamado Rod Ross. Otro de pelo rubio largo con gafas y una nariz grande que se llamaba Jack Neylon y el otro y el otro nuevo era también rubio aunque más claro y largo y ojos marrones cuyo nombre era Zakk Irius. Al ver entrar a Mello todos dirigieron sus vistas a él, viendo cómo se iba antes a la cocina que daba al comedor y de un armario que solo tenía la llave cogió una de sus tabletas de chocolate. La desenvolvió y se sentó en uno de los sillones teniendo delante de él a todos.

-¿Y bien? – Dijo con su semblante serio - ¿Habéis averiguado algo?

-Los estuvimos buscando, pero los muy cabrones son escurridizos. – Empezó a decir Zakk – Seguimos a dos pero se dieron cuenta de que los seguíamos y empezaron un tiroteo cuando estábamos en un almacén abandonado

-Atrapamos a uno pero antes de hacerlo hablar se mordió la lengua y murió desangrado, al otro lo matamos a balazos – explico Ross

-Hum… - Mello se llevó una mano a la mejilla – Son bastante astutos por lo que parece. A este ritmo nos van a quitar nuestro territorio y lo que es peor, descubrirán nuestra guarida. No podemos permitirnos más fallos.

-Sí Mello – contestaron los tres a la vez

-¿Qué hay del grupo de Jose? – dijo Mello mirando a Matt quien ahora tenía un portátil en las muslos

-Estoy en ello – tecleaba a velocidad descomunal y se oyó un pitido – Parece que están en las afueras al suroeste, pero es extraño. No noto la señal de los demás, solo la de Jose. ¿Los han podido descubrir?

-En cualquier caso esos GPS que colocamos están provistos de un sistema de seguridad que si no insertas el código cada hora este se autodestruirá. Si los han encontrado e intentan llegar, no podrán encontrarnos en una hora desde la última vez que fue introducido el código.  

Desde hace unos meses, el grupo de Mello había entrado en guerra contra otro de los grupos de la mafia Yakuza. Estos les habían ofrecido ser parte de su grupo y dejar que sean ellos los que dominen en la ciudad, pero Mello, no estaba dispuesto a recibir órdenes de nadie, además de que el día que quisieron hacer el trato ni siquiera se presentó su jefe, de esa forma fue cuando empezaron sus problemas con los Yakuza. Las actividades de su grupo mafioso siempre se veían perturbadas por este grupo y casi siempre acaban muriendo tanto los de un grupo como los de otro.

Mello no conocía de cara a su líder pero se hacía llamar Dragón Rojo, y por lo que había oído en la ciudad y había descubierto gracias a periódicos y noticias es que es bastante peligroso tanto para sus aliados como para sus enemigos.

-¿Qué hacemos ahora Mello? – pregunto Jack

-¿Qué qué hacemos? - Mello fulmino con la mirada a Jack - Seguimos con nuestros planes ¿que vamos a hacer sino? ¿Acaso tienes miedo?

-N-no- dijo Jack temblando como una hoja y sudando – Es solo que ahora se nos hace muy difícil llevar a cabo nuestras misiones por culpa de esos desgraciados.

-Hum, no podrán detenernos eternamente. Algún día meterán la pata y cuando eso ocurra estaremos allí para acabar con ellos – Mello sonrió de forma malévola, recordó que ahora tenía en su poder un arma que no tenía antes, la death note, y tal vez eso sea la clave para acabar con Dragón Rojo y los suyos. – Por ahora tomaros un descanso. Matt sigue vigilando en el ordenador al grupo de Jose.

-¿¡Eh!? Pero estoy cansado, llevo dos días sin dormir – dijo Matt con voz de niño pequeño

-¡¡Tú hazlo!! ¡Considéralo un castigo por entrar a mi habitación sin llamar! – Mello se levantó y se fue dejando a Matt y a los demás en el comedor.

Oyó unas risillas de parte de los otros tres al mismo que cuando miro por última vez vio a Matt haciendo pucheros.

Avanzo por el pasillo y cuando llego a la puerta se paró un momento. El corazón le latía más rápido de lo normal y había empezado así con el simple hecho de que JJ iba a estar dentro, pero se quitó ese pensamiento de la cabeza y entro

Se esperó ver a JJ en el mismo sitio donde la dejo pero para su sorpresa estaba tendida en la cama, con los ojos cerrados y durmiendo profundamente. Mello se sorprendió un poco

-“No sabía que los shinigamis durmieran…” – se dijo así mismo

La postura que cogió para dormir hacia que la poca ropa que estuviera usando se le levantara un poco, mostrando por completo sus piernas. Mello no pudo evitar quedarse mirándola un poco, era un hombre al fin y al cabo, y aquella situación le estaba no pensar con claridad.

Se acercó a ella para verla más de cerca.

-“Reconozco que a pesar de ser un monstruo es bastante guapa” – cada vez se acercaba más a ella hasta que un movimiento proveniente de JJ hizo que ahora sus caras estuvieran frente a frente. Mello vio los labios medio abiertos de la shinigami y por su cabeza paso el deseo de probarlos. Se acercó cada vez más, entorno los ojos y estaba a solo unos milímetros de ella cuando un quejido suyo lo espabilo e hizo que se alejara – “¿¡Pero qué demonios he estado a punto de hacer!?” – Se regañó así mismo – “hay millones de chicas en el mundo y mucho mejores que ella, además de ser humanas. ¿Por qué tengo la necesidad de querer besarla? – se llevó las manos a la cara y se sentó en el borde de la cama al lado de JJ

Al rato se levantó y cuando vio la tableta que se había dejado en la mesa y que aún no se había derretido se la siguió comiendo sentándose en el sillón mirando por la ventana. De vez en cuando desviaba la vista para mirar a JJ quien daba alguna que otra vuelta y alguna postura hacia que mostrara más piel de la necesaria y Mello se ruborizara, teniendo que hacer un esfuerzo para no volver a esa cama y lanzarse sobre JJ.

-N-no… - oyó al poco Mello. Se giró hasta JJ pero esta vez con cara de confusión

-“¿Estará soñando?” – Mello se acercó más a ella de nuevo y esta vez vio que tenía una mueca de dolor en la cara – “¿Qué estará soñando?”

*Sueño de JJ*

JJ corría desesperada, no sabía hacia donde, pero todo a su alrededor estaba en llamas, y huía desesperadamente de ellas

-¡¡Eh!! – Grito - ¡¡¿Hay alguien aquí?!!

Pero no recibía respuesta, hasta que el lugar empezaba a derrumbarse, motivo de las llamas que podrían la madera. Esquivo los trozos pero uno le cayó directamente en la pierna lo que le impidió seguir caminando. Intento desesperadamente salir pero no podía, además empezaba a tener un calor sofocante debido al fuego.

Oyó un crujido encima de ella y vio como otra de las tablas le venían encima. Antes de llegar a darle por su cabeza pasaron miles de imágenes a velocidad descomunal, tan rápidas que no le dio tiempo a ver ninguna, salvo una de un gran edificio con una verja y niños jugando entre la casa y la verja, con una placa en la que ponía algo que apenas pudo llegar a leer: “Wammy’s House”

*Fin del sueño*

Se despertó agitada y bastante acelerada, y en el moemtno en el que lo hizo noto que la abrazaban. A Mello le pillo de golpe que JJ se levantara y por inercia en cuando se echo encima de ella totalmente asustada la abrazo.

JJ respiraba fuerte y estaba sudando bastante. Se cogió a la camiseta de Mello y hundió su cabeza en su hombro. Mello no le dijo nada, solo la dejo ahí a esperar a que se calmara, sin soltarla

Pasaron un par de minutos hasta que por sí sola JJ se separó de Mello, pero este seguía cogiéndola de los brazos

-¿Estas bien? – le dijo, aunque  pensó que la pregunta era algo estúpida

JJ cerró los ojos y asintió con la cabeza, aunque seguía respirando algo agitada pero no tanto como antes

-Solo ha sido una pesadilla… - el silencio volvió a reinar, ambos se miraron pero ninguno dijo nada. JJ noto algo raro en la mirada de Mello, era una mezcla entre preocupado y triste, algo que nunca pensó que vería en él, y eso que lo acaba de conocer hace solo unas horas,pero Jj podía conocer a las personas con solo mirarlas y Mello no se veía el típico chico que se preocupara de los demás solo de él mismo, por eso el haberla abrazado cuando despertó de ese horrible sueño lo vio muy extraño – Gra-gracias…

-No ha sido nada – Mello se levantó y se volvió a sentar en el sillón algo confundido por lo que acababa de pasar. JJ le seguía mirando y cuando Mello se giró a ella, esta desvió la mirada – No sabía que los shinigamis durmieran

-¿Eh? Bueno… eso solo son los que llevan varios años muertos. Con el tiempo olvidan las costumbres humanas, como son dormir o comer

-Y tú aun tienes esas costumbres por lo que veo

-Es lo malo de estar recién muerta – sonrió. A Mello le pillo de sorpresa que al decir eso ella sonriera y más aún decir que estaba recién muerta

-¿Quieres decir… que no llevas siendo shinigami tanto tiempo?

-No, solo unos cuantos meses. Cuando alguien muere, el Rey Shinigami decide a quien transforma n shinigami y quien va al cielo o al infierno. Tanto personas buenas como malas se transforman en shinigamis, eso depende de él. Cuando acabas de morir, aun recuerdas todo sobre quien fuiste cuando estabas vivo. Pero con el paso del tiempo, acabas olvidándolo todo – JJ levanto un poco la mano mirándosela y cerrando el puño, con una mirada triste – familia, amigos, incluso quien fuiste en esa vida… Una vez pasa eso, no hay vuelta atrás…

-¿Y tú…? – A Mello le dio algo de pena preguntar pero su curiosidad podía más - ¿Ya has olvidado todo de ti?

-Casi todo… ahora solo me quedan fragmentos sueltos. Recuerdo el día de mi muerte. Es lo que sueño la mayoría de las veces. Fue en una casa en llamas – dijo JJ recordando su sueño – No recuerdo que hacia ahí. Una de las tablas del techo me cayó en el pie atrapándomelo y luego una me cayó encima del todo matándome. Es horrible porque cada vez que lo sueño, siento en mí el calor, el dolor y el miedo que tenía en ese momento – JJ se encogió ante la atenta mirada de Mello.

-¿Solo recuerdas eso? – Ninguno de los dos se dio cuenta, pero JJ pasó de estar matando con la mirada a Mello a contarse secretos personales que nadie contaría a un recién conocido, y menos después de la primera impresión que tuvieron

-No… antes de que la tabla me cayera encima siempre pasan imágenes fugaces en mi cabeza. Seguramente serán recuerdos de mi pasado. Pero hay uno en particular que veo con claridad entre todos. Es una casa, enorme, donde hay niños jugando, veo a una niña y un chico cogidos de la mano, ambos de espaldas a mi vista. Creo que la niña soy yo y el otro es un chico con el pelo igual que yo que viste con una camisa blanca y pantalones vaqueros y que va siempre encorvado.

Mello abrió los ojos como platos, el conocía a una persona con esa descripción, no había muchos en el mundo que vistieran así y además fueran encorvados

-O-oye – A Mello le temblaba algo la voz – ese edifico que ves… ¿reconoces cuál es?

-¿Mm? Sí tiene una placa en la puerta que pone Wammy’s House ¿Por qué?

Mello se levantó de un salto, tirando la tableta al suelo y mirando con los ojos como platos a JJ lo que hizo que ella se asustara un poco

-Oye, ¿estás bien?

-“No puede ser… es imposible. Esta chica, estaba en el mismo orfanato que yo y además le conocía a él. Solo había una persona que tuviera tanta confianza con él en Wammy’s House… Pero, si no está mintiendo, eso significa que…”

Mello: ¡¡Shiraneeeee!! Ò.Ó

Shirane: (Oh Dios voy a morir TT.TT)

Mello: ¿Como te has atrevido a publicar un capitulo sin decirme nada? Ò.Ó

Shirane: Eh yo bueno eh jeje ^^'

JJ: Mello ¿porque no en vez de quejarte lo lees y ya esta? Ademas ha sido culpa tuya de que Shirane no te avisara porque la amenazaste de muerte ¬¬

Shirane: S-sí cierto. Así que la proxima vez que me amenaces no te dire nada y tal vez incluso ni salgas en el capitulo Ò.Ó

Matt: jajajajaja ahi te ha pillado XDDDD

Mello: Ò.Ó#

Shirane: Bueno y hasta aqui el capitulo 3. Nos vemos en el cuarto, aunque tal vez a Mello no XDD

JJ y Matt: jajajajA XDD

Mello: Os juro que algun dia os matare... Ò.Ó#

UNA SHINIGAMI ENAMORADA by Shirane

JJ es una shinigami que pierde su cuaderno en el mundo humano por culpa de una jugarreta de otro shinigami, Beyond. Cuando lo encuentra y está a punto de alca

fanfic

es

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2024-11-09

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