Eiko Fuji by NairaPeace

 

 

 

Eiko Fuji by NairaPeace
Summary:

La hermana menor de Syuusuke Fuji a vuelto a Japón y es la nueva compañera de Ryoma Echizen. Sentimientos nuevos nacerán para el peli verde al pasar el tiempo ¿Qué es lo que tiene esta chica que lo hace actuar de una forma diferente?


Categories: PRINCE OF TENNIS, ANIME/MANGA Characters: Ninguno
Generos: Romance
Advertencias: Ninguno
Challenges:
Series: Ninguno
Chapters: 17 Completed: No Word count: 32473 Read: 4133 Published: 03/10/2012 Updated: 23/10/2013
Summary:

La hermana menor de Syuusuke Fuji a vuelto a Japón y es la nueva compañera de Ryoma Echizen. Sentimientos nuevos nacerán para el peli verde al pasar el tiempo ¿Qué es lo que tiene esta chica que lo hace actuar de una forma diferente?

 


Categories: PRINCE OF TENNIS, ANIME/MANGA Characters: Ninguno
Generos: Romance
Advertencias: Ninguno
Challenges:
Series: Ninguno
Chapters: 17 Completed: No Word count: 32473 Read: 4133 Published: 03/10/2012 Updated: 23/10/2013 Capitulo 1 "Eiko Fuji" by NairaPeace

Comenzaba el segundo semestre de clases en la academia Seichun Gakuen, más conocida como Seigaku. Ryoma se dirigía a su salón, seguido por sus compañeros Horio, Katsuo, Kachiro, Tomoka y Sakuno, ya que los seis nuevamente estaban en el mismo curso. Sus puestos eran los siguientes: Sakuno se sentaba junto a Katsuo en el primer puesto de la fila izquierda, en el primer asiento del centro estaba Ryoma sin un compañero, atrás del estaban Tomoka y Horio, y en el primer asiento de la fila derecha estaba Kachiro con una compañera.

El profesor había llegado, luego de presentarse, saludar a los alumnos y hacer que se sentaran, presento a una nueva alumna...

-Chicos, pongan atención por favor- comenzó a hablar el profesor- hoy se integra a nuestro grupo una nueva compañera, pasa por favor

Entró a la sala una chica de ojos azules, un cuerpo esbelto y con el pelo largo hasta la cintura, ondulado y negro.

-Su nombre es Eiko Fuji, sean amables y acogedores con ella

-¿Fuji?- pregunto en un tono bajo Ryoma

-¿Qué tal si te sientas al lado de Echizen?- pregunto el profesor dirigiéndose a Eiko- Aquí es

Tomó asiento, sacó un cuaderno y un estuche, sin que se dirigieran una sola palabra, comenzó la clase.

La jornada escolar había terminado, e iniciaron los clubes, que por cierto, ahora todos eran mixtos. Ryoma, Sakuno y los demás, también Tomoka, se dirigían a las canchas de tenis, ya estaban listos para comenzar la práctica. Todos tenían mucha energía y luego de terminar con el calentamiento, tuvieron el resto del tiempo libre.

 

 Sakuno estaba jugando un partido de práctica con Tomoka, pero algo llamo la atención de esta última.

-Mmm... ¡Mira Sakuno ahí está Eiko!- dijo indicándole y casi gritando

Aquel comentario también fue escuchado por Ryoma, y desvió su mirada hacía donde indicaba la chica. Tomoka corrió hacía la salida de la cancha para dirigirse a Eiko

-¡Hola Eiko!- dijo Tomoka con un grito que sorprendió a la chica

-Hola

-¿Qué haces aquí?

-Vine a observar la práctica

-¿Acaso piensas unirte al club de tenis?- pregunto Tomoka con un brillo en sus ojos, cualquier persona era bienvenida en el club para ella

-Podría ser- dijo Eiko, devolviéndole una sonrisa

-Bien, nos vemos después entonces, adiós

Tomoka regresó antes de que le llamaran la atención

-Eiko Fuji es muy simpática ¿no crees Saku?

Ryoma y Syuchirou jugaban un partido y de pronto este ultimo paro, acción que extrañó al peli verde

-¿Eiko?... ¿Fuji?- preguntó Syuchirou extrañado

-Sí, es una nueva compañera, llegó hoy a nuestro salón- respondió Sakuno

-Mmm... - Syuchirou quedó pensativo

-Tiene algo que ver con Syuusuke-sempai ¿verdad?- preguntó Ryoma

Todos quienes se encontraban alrededor de Syuchirou lo miraron con extrañeza, hasta que decidió hablar

-Ella, es su hermana menor

Todos se quedaron boquiabiertos, incluyendo a Ryoma, aunque no lo demostrara. Tezuka, Syuusuke y la entrenadora Ryusaki se encontraban hablando con Eiko a la salida de la cancha, por lo tanto no escucharon tal conversación.

-Su... ¿hermana menor?- preguntó Kikumaru quien también estaba escuchando. Quien habló después fue Kaoru.

-¿Y tú como lo sabes Syuchirou-sempai?

-Porque ella... ella fue la primera en ganarle a Tezuka.

 

End Notes:

Es mi primera historia & solo espero que les haya gustado, & que dejen sus comentarios para saber si seguiré escribiendo & si hay algo que debo cambiar o mejorar. Muchas gracias por darse el tiempo de leer ^^

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Es mi primera historia & solo espero que les haya gustado, & que dejen sus comentarios para saber si seguiré escribiendo & si hay algo que debo cambiar o mejorar. Muchas gracias por darse el tiempo de leer ^^

Regresar al índiceCapítulo 2 "Ryoma derrotado" by NairaPeace

En el momento en que escucharon a Syuchirou reinó un profundo silencio, él continuó hablando

-Antes ella vivía acá en Japón, con Syuusuke y sus hermanos, y cuando nosotros teníamos 10 años y ella 8, llegó a la práctica con Syuusuke y fue ella quien desafió a Tezuka. Ganó los 6 juegos, y Tezuka apenas y toco la pelota, no logró hacer ningún punto. Yo estaba ahí junto con Syuusuke viendo el partido, y Eiko a su corta edad dominaba técnicas muy difíciles, inimaginables para mí a esa edad…

-¿Cómo qué tipo de tenis juega?- preguntó Momoshiro

-Puede ser, algo así como el tenis de Syuusuke, pareciera que tiene mucho más para dar… mucho más que aquella vez

 Ryoma dirigió su mirada hacia Eiko, se estaba riendo, junto con Tezuka y Syuusuke

-El capitán Tezuka…-dijo Momoshiro-¡Está riendo!

-Si… -hablo Syuchirou- Tezuka con los hermanos Fuji son muy buenos amigos, gracias a la larga relación de amistad que ha tenido con Syuusuke

 

 Ryoma volvió a mirar a Eiko, no lo pensó más y se dirigió hacia donde ellos estaban.

-¡Echizen!- gritó Oishi- ¡¿Qué vas a hacer ahora?!

-Juguemos un partido- dijo Ryoma apuntando a Eiko con su raqueta, todos lo miraron con extrañeza

-Bueno- respondió Eiko cortante y sin darle mayor importancia

-Claro que no- esta vez fue el capitán quien habló- Echizen vuelve al entrenamiento

-No quiero

-¡Ahora!

 Ryoma lo miró de una forma desafiante, resignado observo a Eiko, quien en un acto de dejación solo levanto los hombros. Ryoma entró a las canchas nuevamente.

-Jajajaja Ryoma el capitán Tezuka te dijo que no- le dijo Momoshiro de una forma burlesca

-Cállate- respondió Ryoma.

 No sabía porque, pero odiaba la forma en que esa niña se llevaba con sus Sempais y lo que más quería en esos momentos, era tener un partido con ella, para comprobar con su propia fuerza si ella de verdad había sido capaz de vencer a Tezuka entes que él, y a una edad tan corta.

 La hora de la práctica ya había terminado, y Eiko estaba en la entrada del Instituto esperando a su hermano mayor, todos se alistaban para irse. Ryoma salió rápidamente sin cambiarse para encontrarse con ella, y cuando la vio no lo pensó dos veces y se acercó.

-¿Ahora sí podemos jugar?

-Sí, pero ¿dónde?

-Vamos a las canchas callejeras que están acá cerca

-Bien

 Eiko esperó a que Ryoma se cambiara para irse con él, pero antes de eso Syuusuke llegó.

-¿Vamos?

-Iré a las canchas callejeras para jugar un partido con Ryoma

Los Sempais que estaban cerca escucharon y Kikumaru se acercó casi corriendo

-¿El pequeñín jugará contra ti? ¡¿Podemos ir?!

-Eh… si, supongo- respondió Eiko con resignación, lo veía muy entusiasmado

-¿Vamos Oishi?- le preguntó el carita de gato muy feliz

-Pero… - miró a Tezuka- ¿Está bien?

-Supongo, es fuera del horario de entrenamiento, así que no tiene porque importarme- respondió con la mirada seria de siempre

-Bien, entonces vamos

 Salió Ryoma del vestidor de varones y Kikumaru le dijo muy entusiasmado que irían a ver el partido, a lo que también se sumaron los novatos, junto con Sakuno y Tomoka.

 Llegaron a las canchas callejeras, Eiko y Ryoma se alistaron para ponerse cada uno en sus posiciones. Eiko jugaría con una de las raquetas de su hermano, y Ryoma con su raqueta roja de siempre. Tezuka fue quien arbitró y Eiko comenzó con el servicio.

 Eiko sacó rápidamente y anotó de inmediato, muy pocos fueron capaces de ver esa pelota, fue a una rapidez impresionante, ni siquiera Kikumaru o Ryoma, que tienen una visión sensible, la vieron con claridad. Todos quedaron atónitos, pero antes de que pudieran hacer un comentario, y antes de que Tezuka pudiera cantar el punto, ella ya había marcado otro punto. Ganó su servicio sin ninguna complicación y Ryoma seguía tratando de entender cómo era posible. Y nadie decía nada. Estaban pasmados, con excepción de Tezuka y Syuusuke que observaban tranquilamente.

 Era el turno de que Echizen sacara, no perdería así, frente a todos.

 Sacó, Eiko devolvió esa pelota con facilidad, y anotó nuevamente. Así fue con el resto del Set. Todos miraban atentos, sin pronunciar ninguna palabra, tratando de encontrar una respuesta a cómo era posible que Ryoma fuera perdiendo de esa forma, ¿Por qué no respondía como siempre?, ¿Por qué ella es una niña? ¿O realmente no podía responder? Syuchirou rompió ese molesto silencio…

 

-Es igual que aquella vez…

-¿De qué hablas Oishi-sempai?- preguntó Kaoru

-De la vez en que Tezuka, perdió contra ella

-Fue… ¿así?

-Igual- respondía seriamente-apenas pudo anotar uno o dos puntos

 El partido había terminado, Ryoma devolvió unas cuantas pelotas pero sin anotar. Nadie se atrevía a pronunciar palabra. El silencio se torno incomodo.

 Ryoma no entendía nada, cómo paso, había perdido, una derrota absoluta. Un sentimiento de ¿desesperación?, algo nuevo nació para él, ¿qué podía hacer? Todos miraban impactados y Eiko estaba totalmente tranquila.

-Bueno, ya tienes lo que querías Echizen- dijo Tezuka- ahora vámonos

-Vámonos Eiko- dijo enseguida Syuusuke

-Ok-respondió ella, se acercó a la red y estiro su mano para terminar con el partido- eres bueno

 Ryoma al escuchar eso, la miró a esos profundos ojos azules, tomando como una ofensa o más bien, una burla, el que ella le dijera eso, sabiendo que había perdido sin anotar ningún punto. Ryoma aparto su mirada, tomo sus cosas y se largó del lugar, tapándose el rostro con su gorra blanca.

 Momoshiro fue tras él, y Eiko lo siguió con una mirada de confusión.

-Ryoma… ¡Ryoma!... ¡detente!- decía Momoshiro casi corriendo tras el

-¿Qué quieres?- dijo deteniéndose de repente

-Mira que hayas perdido contra una chica no significa que seas malo… Jajajaja ¿Qué estoy diciendo? Lo hiciste a propósito ¿no? Porque bueno ya sabes, por ser una mujer…- dijo mirando a Ryoma con picardía

-¿Me crees capas de quedar en ridículo a propósito?

-¿Qué? ¿No perdiste a propósito?

-Claro que no, sabes que detesto perder

 Momoshiro quedó absorto, durante todo el partido estuvo pensando que Ryoma estaba perdiendo de esa manera con intención, pero no era así. Ryoma se despidió de su sempai y se fue a su casa pensando todo el camino en cómo había perdido de esa manera, en el tenis de su compañera, o más bien… en Eiko.

End Notes:

Aquí tenemos el segundo capi *-* Espero que les haya gustado, trataré de subir lo antes posible la continuación. Cuidense & muchas muchas gracias por el apoyo C: Besos

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Aquí tenemos el segundo capi *-* Espero que les haya gustado, trataré de subir lo antes posible la continuación. Cuidense & muchas muchas gracias por el apoyo C: Besos

Regresar al índiceCapítulo 3 "Sonrisas" by NairaPeace

Al otro día Ryoma llegó al instituto Seigaku y se encontró con su compañera de puesto

-Buenos días Ryoma ¿Cómo estás?- dijo Eiko con una sonrisa en su rostro

Desde cuando le tenía tanta confianza, si nunca habían hablado, aunque no es que le molestara que ella le hablara así, al contrario, por alguna extraña razón, le gustaba.

-Bien, ¿y tú?-respondió serio y sin mirarla

-Bien

 Se sentaron todos en sus respectivos asientos, en el transcurso de la clase Eiko le hablaba a Ryoma, pero como solo eran  cosas puntuales no tuvieron oportunidad de entablar una conversación. La clase transcurrió sin mayor intervención.

 

 Llegó la hora del almuerzo, Tomoka había invitado a Eiko a comer con ella y Sakuno, pero como no llevó almuerzo decidió subir a la azotea. Cuando abrió la puerta del lugar encontró allí a Ryoma recostado con su gorra tapando su rostro, no sabía si estaba despierto o si dormía. Se acercó  de forma sigilosa, se sentó frente a él y lo miro fijamente.

-¿Ryoma?

 El aludido se sorprendió, realmente no se había dado cuenta de su presencia, pero su sorpresa paso desapercibida para Eiko.

 Ryoma se sentó para quedar frente a ella.

-¿Qué quieres?- dijo rascando su cabeza en un signo de dejación

-Solo quería estar sola un momento

-Pues que lástima, no me iré-dijo acomodándose nuevamente en el suelo y colocando sus manos detrás de la nuca.

-No quise decir eso, no me molesta estar contigo- dijo colocándose al lado de Ryoma también mirando al cielo.

 Ryoma una vez más, fue sorprendido por la chica, no esperaba esa reacción.

-¿Por qué dices eso?- tenía una cierta inquietud por saber

- ¿Cómo que por qué?- dio vuelta su rostro para mirarlo, ¿por qué le preguntaba eso?

 Ryoma iba a contestarle, al igual que la chica dio vuelta su rostro para mirarla, y por alguna razón desconocida para él, no pudo seguir hablando. Ambos se quedaron mirando, Ryoma se había perdido en esos profundos ojos azules.

 Sentía una tranquilidad absoluta mientras estaba con ella, pero ¿por qué? Era algo que no podía evitar y tampoco encontrarle una respuesta. Y eso le molestaba.

 Se levantó con una mirada confusa, Eiko también se levantó.

-¿Qué sucede?

-Nada-respondió cortante y desviando su mirada a otra parte

-¿Te molesta que esté contigo?-preguntó Eiko con la mirada fija en el suelo.

 Ryoma la miró, la encontraba muy linda, le encantaba su cabello, largo, ondulado y negro, esos ojos azules y su cuerpo perfecto.

 Agitó su cabeza tratando de que esos pensamientos se fueran o so no terminaría siendo como su padre.

-No me molestas-habló Ryoma sin mirarla-al contrario… me gusta que estés conmigo- no sabía porque le había dicho eso, el no era así.

 Eiko al escuchar esa última frase se sorprendió un poco. Siempre había visto a Ryoma como un chico egocéntrico a quien todas las muchachas aman, pero ahora parecía ser otra persona, alguien tierno y que lograba entregarle una tranquilidad que no sentía con nadie más. Era como si entre ellos se entendieran, y no fuera necesario romper ese silencio que reinaba el lugar, un silencio que no era incomodo.

 Eiko miró a Ryoma para luego sonreírle.

 Esa sonrisa, lo volvía loco, le gustaba y sentía la necesidad de protegerla, para que no sufriera y para que siempre pudiera ver esa sonrisa que lo reconfortaba tanto. Pero ¿por qué? ¿Sería acaso que ella le gustaba?

 Ante ese gesto, Ryoma también sonrió, pero apenas se notaba, no era fácil para el chico demostrar lo que sentía. Aun así Eiko lo notó.  

 La jornada escolar había pasado lentamente para Echizen, en todo momento no dejó de pensar en su compañera de puesto, y en la posibilidad de que ella le gustara.

 Otro día comenzaba y en el transcurso de las clases ninguno de los dos intercambio una sola palabra, eso lo irritaba, le gustaba conversar con ella, aunque solo fueran conversaciones breves. Pero su orgullo no lo dejaba iniciar una conversación, ya que era siempre ella quien comenzaba a hablarle y si no lo había hecho esta vez, significaba que algo andaba mal.

 

 Llegó la hora del almuerzo y comieron todos juntos. Luego Tomoka decidió que irían a descansar al patio mientras la hora del almuerzo terminaba. Cuando iban saliendo al patio Eiko se acercó a Ryoma y le habló susurrándole al oído.

-¿Subamos?-una simple palabra que hiso estremecer al chico de ojos ámbar, se sorprendió, pero sin necesidad de decir otra palabra, y sin que los demás se dieran cuenta comenzaron a caminar hacia la azotea.

 Llegaron, y Ryoma se recostó en la misma posición de siempre, mirando al cielo. Eiko se sentó frente a él, lo observó unos segundos, acto que éste noto y la miró.

 Ambos se perdieron en los ojos del otro, al igual que el día anterior, hasta que esta vez fue Eiko quien desvió su mirada para luego acomodarse al lado de Ryoma. Él solo la seguía con la vista.

-¿Sabes?-comenzó a hablar Eiko con la vista hacia el cielo-Cuando estoy contigo, siento una tranquilidad que nunca antes había sentido con alguien más…

 Ryoma no había dejado de mirarla, y cuando escucho esas palabras su rostro mostró algo de sorpresa. Lo que ella le decía, era lo mismo que le pasaba a él. Era como si cuando están juntos, nada más que ellos importara. Eiko continuó.

-Creo… creo que me gustas

 Ryoma quedó pasmado, Eiko seguía mirando al cielo y él seguía contemplándola a ella. ¿Qué haría ahora? No sabía si decirle lo que le pasaba ¿Cómo iba a reaccionar ella? Muchas preguntas pasaban por la cabeza del chico, no supo que hacer, así que solo desvió su mirada y se tapó el rostro con la gorra.

 Eiko al notar esto, lo miro… ¿había sido rechazada? En realidad si ese era el caso, no le importaba, solo quería ser honesta con Ryoma y que él supiera lo que sentía. Aun que no le gusto como reaccionó, ¿no le importo? Al parecer si era el chico egocéntrico que los demás pensaban.

 Notó como se paró dispuesta a salir del lugar, la veía alejarse, se comenzó a desesperar ¿otra vez se quedaría sin hacer nada?

End Notes:

Tercer capitulo *-* Espero que les guste, gracias a quienes se dan el tiempo para leer.

*El próximo capitulo se viene bueno jijí... Besos 

End Notes:

Tercer capitulo *-* Espero que les guste, gracias a quienes se dan el tiempo para leer.

*El próximo capitulo se viene bueno jijí... Besos 

Regresar al índiceCapítulo 4 "Besos" by NairaPeace

 En el momento en que abrió la puerta para salir, sintió que la tomaban bruscamente de la muñeca.

 La acercó hacia él, no dejaría que se fuera, no podía desaprovechar esta oportunidad para decirle que era lo que sentía.

 Quedaron frente a frente. Se perdieron en sus miradas, Ryoma la tomó por la cintura para acortar aún más las distancias, quedaron así unos segundos. Eiko rodeo el cuello del chico con sus brazos. Sus frentes se juntaron. Mientras se miraban a los ojos, Ryoma habló.

-Tú también me gustas… y demasiado

 Eiko no dijo nada, estaba un poco ruborizada. Ryoma lo notó y ambos se sonrieron.

 La chica le sacó la gorra a Ryoma con una mano, para la otra entrelazarla en esos cabellos verdosos.

 

 Ambos se acercaron, sentían las respiraciones del otro. Cerraron sus ojos para luego unir sus labios en un tierno beso.

 No quería que terminara nunca, las sensaciones que estaba sintiendo en ese momento, eran únicas, un sentimiento desconocido para el chico, para ambos. Sentía como la muchacha le acariciaba el pelo, le encantaba. Ella le encantaba.

 Lentamente separaron sus labios, les faltaba el aire, se miraron a los ojos. Sonrieron.

 No dijeron nada, no fue necesario, se quedaron en la azotea, en silencio, hasta que sonó la campana para volver a clases.

 No hablaron nada. Y el silencio se estaba tornando incomodo.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

 La jornada del viernes comenzaba, Ryoma entró al salón de clases y se sorprendió al no encontrar a su compañera de puesto. Ella siempre estaba ahí antes que él.

 Se fue a sentar e inmediatamente se dio vuelta para dirigirse a Horio y a Tomoka que eran quienes se sentaban atrás.

-¿y Eiko?

-no lo sabemos- respondió Tomoka- al parecer hoy no vendrá

-¿desde cuándo son tan amigos?- preguntó Horio con una mirada de picardía

-¿por qué lo dices?

-bueno, la llamaste por su nombre, a veces se desaparecen… jejeje

-no digas tonteras- dijo Ryoma tratando de no darle mayor importancia, aunque Horio tuviera la razón. Se dio la vuelta.

¿Por qué no llegaba?

 Pasaron las dos primeras horas de clases, y al parecer Eiko no llegaría. Tampoco podría comunicarse con ella, no tenía su número telefónico, y no iría a su casa ya que hoy tenía práctica de tenis. Tenis… es cierto, con todo lo sucedido no había pensado en su mayor pasión, el tenis. Tampoco había pensado en la vez en que Eiko lo venció. zsh themes - all about z shell and oh-my-zsh themes

 Mientras la clase de inglés avanzaba, se abrió la puerta del salón para dar paso a la dueña de sus pensamientos.

 Eiko entró, se veía desganada, como si hubiera pasado una mala noche.

 Se dirigió al profesor para luego de saludarlo, entregarle un papel pequeño. El pase que le permitía entrar a clases a esa hora. Después se fue a su asiento, se dio cuenta de la forma en que Ryoma la miraba, trato de mostrarle una sonrisa.

 Llegó la hora del recreo…

-Vamos- dijo Ryoma, mientras veía que Eiko se acomodaba en su asiento como tratando de dormir

- me quedaré acá, tengo mucho sueño

- entonces me quedaré contigo – dijo mientras se sentaba en su puesto - ¿me contarás que es lo que te paso?

- ¿No puede ser en el almuerzo?

- Claro que si, relájate

 Eiko se acomodó en su banco, realmente agradeció que Ryoma no insistiera en saber en el instante, solo quería descansar un poco, no había pasado una buena noche.

 Solo la miraba, con eso se conformaba, con tenerla ahí, frente a sus ojos. Pero necesitaba saber porque estaba actuando así, que le había pasado. Pero los ojos de la chica mostraban agotamiento, y él lo notó, no le gustaba verla así, era mejor no forzarla por el momento.

 Llegaron los estudiantes al salón, ya que el primer recreo ya había terminado. Eiko se reincorporó en su asiento para continuar con las clases. Las horas pasaban muy lento para el muchacho, ansiaba saber que era lo que le había sucedido a Eiko. Hasta que por fin llegó el momento tan esperado, el almuerzo.

 

 Cuando se disponía a salir del lugar, Ryoma notó que Eiko no había traído nada para comer, lo que le extraño.

-¿No comerás?- preguntó Ryoma

-No tuve tiempo para hacerme un almuerzo, vamos

 Se separaron de los demás para subir a la azotea.

-Bueno… ¿puedes decirme que te paso?

 -No pase la noche en mi casa- dijo Eiko, mientras ambos se sentaban

No se esperaba una respuesta así. Entonces ¿dónde paso la noche? O mejor dicho ¿con quién?

-Entonces… - dijo Ryoma con inseguridad en sus palabras- ¿dónde?

-En la casa de un amigo, que conozco hace muchos años

-Ya veo- esa era la respuesta que justamente no quería escuchar. Desvió la mirada. Eiko lo notó, así que continuó hablando.

-Anoche, mis padres comenzaron a pelear, últimamente esas peleas son muy seguidas, pero, anoche creo que colapsé con  toda la rabia… o más bien, la tristeza que me causa el verlos discutir de esa forma. Me puse a llorar, mi hermano se enojó y se fue a su habitación, mientras que mis padres seguían gritándose. No sabía qué hacer, así que subí a mi habitación y le pedí a mi amigo que me dejara pasar la noche en su casa, porque ya no soportaba más estar en ese lugar…

 Ryoma abrió sus ojos con sorpresa, se sintió como un estúpido, dudo de Eiko, pensando en que tenía algo con otra persona.

-¿Por qué no me llamaste a mi?-preguntó cabizbajo

-Lo siento, en ese momento no sabía qué hacer, tampoco sabía lo que hacía y en lo que pasaría después. Creo que realmente estuvo mal no pensar en ti, antes que otra persona, ya que, en estos momentos eres el más cercano a mí.

-Entonces, ¿me tendrás presente si te ocurre algo más?-dijo Ryoma sin levantar la vista

-Te lo prometo- dijo mirándolo para sonreírle, acto al que él respondió con otra sonrisa

 Eiko se acercó a Ryoma para abrazarlo, lo necesitaba, un abrazó, su abrazo.

 Ryoma la rodeo por la cintura, sentía como Eiko se acomodaba en su pecho, le encantaba, el sentirla cerca.

-Gracias, por preocuparte-dijo Eiko, apoyada en el pecho del muchacho

-Tú sabes… que siempre me preocuparé por ti

 Se miraron, para juntar sus frentes, cerrar sus ojos y unir sus labios…

End Notes:

 Perdonenmeeee No había tenido tiempo para seguir escribiendo, e estado con muchos trabajos & pruebas :c De verdad perdón, aprovecharé este fin de semana largo para escribir otro capitulo.. Que lo pasen muy bien & muchos besos para ustedes, gracias
La próxima semana trataré de hacerlo más largo.

Gracias por leer, y espero sus comentarios, muchas muchas gracias ^^

End Notes:Me quedó ultra cortooo >
La próxima semana trataré de hacerlo más largo.

Gracias por leer, y espero sus comentarios, muchas muchas gracias ^^Regresar al índiceCapítulo 17 "Mi novia" by NairaPeaceIban camino a la casa de Eiko. Ryoma la iría a dejar.

No articulaban palabra.

En un momento dado, Ryoma estiró su brazo para alcanzar la mano de Eiko. Entrelazó sus dedos con los de ella.

Eiko lo miró un poco confundida, pero respondiendo a la acción de igual forma.

-¿Te molesta? - preguntó Ryoma

-Para nada... - le sonrió

Por más que sus sentimientos fueran correspondidos, o se hubieran declarado su cariño ya varias veces, no estaban acostumbrados a esos gestos, a esos gestos que llegan a decir más que muchas palabras.

Ryoma también le sonrió.

Le gustaba verlo sonreír. Sentía que era privilegiada al poder presenciar esa sonrisa.

Llegaron a su destino, y Eiko demostró un semblante un poco apenado por tener que separarse de su nuevo novio.

Ryoma lo notó, y se alegró en su interior.

-Procura descansar para mañana ¿sí? - la miró

-Pierde cuidado – le sonrió – Y... gracias por tu apoyo

-Para eso estoy

Ryoma se fue acercando peligrosamente a los labios rosados y delicados de la joven.

Ella también se fue acercando, y pasó sus brazos por detrás del cuello del muchacho mientras que él la afirmaba de su pequeña cintura.

Cerraron sus ojos con lentitud y finalmente juntaron sus labios en un esperado beso.

Sin quererlo, se despidieron.

Eiko le hizo caso a Ryoma y se fue a acostar un poco más temprano de lo normal para así descansar.

Saludó a los presentes en su casa, la Sra. Junko y su hermano, quienes la miraban con algo de extrañeza, pero felices por ella porque un nuevo brillo en sus ojos demostraba lo bien que se encontraba.

Se acostó pensando en cuáles serían las palabras que usaría al día siguiente para contarle todo a Tomoka, y que no se le podía escapar ningún detalle.

Al otro día se levantó con mucho ánimo y un poco más temprano de lo normal, había dormido bastante bien así que no le afectaría.

Se fue al Seigaku con su hermano, que la mayoría de las veces se iba un poco antes que ella.

-¿Qué te pasó? - lo miraba un poco divertido

-¿Por qué lo dices? - ella lo miraba confundida

-Estás más alegre de lo normal

Pensó un momento en si sería buena idea decirle o no a Syuusuke.

“Qué más da. Después de todo se terminará enterando ¿no?”

-Bueno... ayer fui a ver a Ryoma, y le dije que quería ser su novia... - se ruborizó al decir aquellas palabras

Syuusuke abrió sus azules ojos.

-Con que eso era... bueno, si están felices, no veo cual sería el problema – Volvió a sonreír como de costumbre – Menos mal que dejaste de hacerlo sufrir

Eiko dejó de caminar y se quedó viendo la espalda de su hermano mayor.

De verdad ¿tanto le había afectado a Ryoma? ¿como para que hasta su hermano se percatara?

Una enorme culpa volvió a invadir su ser, y también un poco de tristeza.

Syuusuke se dio vuelta y se arrepintió un poco de sus palabras. Trató de hacerla sentir mejor.

Caminó hacia atrás para mirar a Eiko, la que tenía un rostro cabizbajo.

-¿Pero ya está todo bien no?

La chica de cabello negro lo miró.

-Eso creo... - sonrió con desgano

-Entonces no tienes de qué preocuparte... ahora puedes recompensarlo por el tiempo que lo hiciste esperar ¿no crees? - la miró con algo de picardía

Eiko entendió la doble intención de ese último mensaje y se ruborizó en el acto.

-No digas esas cosas hermano – siguió caminando a paso rápido, dejando a Syuusuke atrás y mirándola con una tierna sonrisa

Llegaron al Seichun Gakuen, y los jóvenes hermanos se separaron para ir cada uno a sus clases, prometieron verse en las canchas a la hora de los partidos.

Eiko entró a su salón y encontró ahí a unos pocos alumnos. Entre ellos, a Sakuno.

Se encontraba sentada en su puesto mirando por la ventana, casi como si estuviera mirando a la nada misma.

Le provocó tristeza verla así. Pero ahora más que nunca debía dejar que la frialdad la dominara. No le haría más daño a Ryoma, menos si era para darle el gusto a otra persona.

Se fue a sentar a su puesto, atrás de ella estaban Tomoka y Horio conversando animadamente.

“Me pregunto por qué Tomo no está conversando con Sakuno, como todas las mañanas”

Acomodó sus cosas en su puesto y se dio vuelta para hablar con sus dos animados amigos.

-Buenos días chicos...

-¡Buenos días Eiko! - dijeron al unísono, algo que hizo reír por lo bajo a Eiko, era increíble lo que se podían llegar a parecer esos dos.

Conversaron un poco entre los tres, pero a Tomoka no se le olvidaba que Eiko le debía una conversación.

-Horio – llamó Tomoka

-¿Ah?

-Katsuo y Kachiro te llaman

-¿Qué? – Miró hacia todas partes – Pero si ni siquiera han llegado

-Están abajo, me dijeron que te llamara pero se me había olvidado decirte

-¿A sí?... ¿Qué querrán?

-¡Pues baja y averígualo! – gritó Tomoka perdiendo la paciencia

-B-bien – Horio se paró de su asiento rápidamente para bajar.

Eiko sólo miraba aún un poco sorprendida a causa de ese último grito de su amiga. Vio cómo Horio salía del salón con rapidez. Miró a Tomoka.

-¿Es mentira?

-Así es, necesitas contarme algo ¿no?

-Jajaja bueno, ayer fui donde – fue interrumpida por la chica de dos coletas, que le tapó la boca repentinamente.

Con sus ojos, la chica de cabello café, hizo una seña para que Eiko mirara a su lado.

La joven captó y miró disimuladamente.

Se le había olvidado que Sakuno se sentaba en la fila del frente, y que en esos momentos estaba presente.

-Háblame más despacio – dijo Tomoka en un susurro.

Eiko asintió y se acercó un poco a su amiga.

-Bueno, fui a su casa, y repentinamente me pidió que jugáramos un partido…

-Ajá… - Tomoka asentía con la cabeza mientras iba escuchando el relato de Eiko.

Después de que terminara de contarle hasta el más mínimo detalle, los ojos cafés de Tomoka demostraban felicidad y un pequeño brillo en ellos se hacía notar.

-Ay… - Tomoka suspiró – Mi Ryoma-sama es tan romántico…

Eiko rió al saber los pensamientos de Tomoka, porque según ella, esa declaración no había tenido nada de romanticismo, aunque fue muy especial.

Llegaron más alumnos, hasta que tocaron el timbre que daba inicio a las clases.

Ryoma no llegaba, Eiko miraba el puesto del muchacho, recordaba lo ocurrido el día anterior y no podía evitar que una sonrisa se formara en sus labios.

Las clases estaban comenzando cuando se abrió la puerta repentinamente, llamando la atención de todos los alumnos.

“Ryoma”

-Permiso profesor – dijo con indiferencia

-Tienes suerte Echizen, aún no paso la lista

-Hmmm – se sentó en su respectivo puesto, miró a Eiko, su novia, quien la miraba con una sonrisa.

Se acercó a ella y le dio un corto beso en la mejilla.

Acto seguido: Una Eiko roja como un verdadero tomate, murmullos por todo el salón, Tomoka y Horio con la boca abierta… En pocas palabras, todos sorprendidos.

Si bien sólo fue un beso en la mejilla, Ryoma nunca había actuado así con alguien, además que en Japón, esas costumbre no son comunes.

Después de unos minutos dejó de haber tanta expectación en el salón. Cosa que relajó a Eiko, la que en esos momentos seguía trabajando en sus actividades estudiantiles como lo hacía normalmente.

El profesor anunció la hora para salir al receso.

Cuando Eiko se iba a poner de pie miró a Sakuno sin razón alguna, pero para su sorpresa, ella también la estaba mirando, con un semblante serio que la hacía verse extraña, no como la Sakuno de siempre.

Sakuno la miró con rabia por un instante, instante que fue suficiente para que Eiko se diera cuenta, se sorprendió bastante por la actitud de su compañera.

La chica de trenzas salió rápidamente del salón.

Eiko iba a ir tras ella, pero sintió cómo era jalada por la muñeca impidiendo que avanzara. Miró a su espalda y encontró a Ryoma, que también tenía un semblante de un poco de molestia.

Al verlo se detuvo inmediatamente. No iría detrás de Sakuno, esta vez no.

-¡Sakuno! – gritó Tomoka al instante en que la vio salir corriendo de la sala.

Tomoka entes de ir tras ella miró a Eiko.

-Que no te afecte ¿eh? Yo iré tras ella – le sonrió

Eiko no dijo nada, se limitó a sonreír ella también.

Ryoma se quedó mirando por donde se fue Tomoka. Sentía que por primera vez desde que la conocía, de verdad debía agradecerle algo.

Los jóvenes novatos y Horio, acompañaban a Ryoma y Eiko en cada recreo.

Llegó el tan esperado por algunos, recreo del almuerzo, momento en el cual ambos tenistas pasaban juntos en la azotea.


No conversaban mucho, sólo cosas puntuales, pero se hacían compañía y eso era suficiente para satisfacer a ambos. Ryoma decidió romper el silencio.

-En un rato más serán los últimos partidos

-Si… ya quiero que comiencen – Eiko lo miraba

-¿Ansiosa?

-Así es – rió con nerviosismo

-Ganarás – miraba hacia el cielo con sus brazos en la nuca

-Te ves muy confiado

-Kikumaru-sempai es muy bueno, pero aún así, no puedes perder ante él… Ni ante nadie más, recuerda que me ganaste cuando recién nos conocimos – hablaba serio

-Mmm – recordaba aquel momento – Sí… ¿por qué me retaste a un partido tan repentinamente?

-Ni siquiera yo lo puedo entender – Ryoma se acercó a Eiko que estaba sentada a su lado, le tomó el mentón con una de sus manos y la miró fijamente – Lo único que sé es que me gustaste desde el primer momento en que te vi.

Eiko se ruborizó en el acto. Pero no se molestaría tratando de ocultarlo. No dejó de mirarlo en ningún momento.

-Te amo Ryoma

-Yo también te amo Eiko…

Ambos se sonrieron, esa sonrisa que sólo les pertenecía a ellos. Se besaron y después se quedaron acostados en el piso de la azotea mientras estaban abrazados.

Ya era la hora de entrar a la última jornada de clases antes de acabar con un nuevo día. Así que sin apuros, comenzaron a bajar las escaleras.

Mientras iban bajando se encontraron con alguien bastante conocido para ambos.

-Kaito – dijo alegre Eiko

-Hola Eiko – miró hacia atrás – hola Echizen

-Hola – respondió éste un poco más cortante de lo normal

-No había tenido la oportunidad de hablar contigo Eiko – dijo Kaito, dirigiéndose de nuevo a la joven

-¿Hablar? – preguntó ella un poco extrañada

-Sí, bueno, era para decirte, que como te lo prometí, fui a ver tus partidos, y a pesar de que no le hayas ganado a ese titular, jugaste muy bien, me sorprendiste Eiko – le sonreía

A Eiko se le subieron los colores al rostro y toda esta escena era observada cuidadosamente por el ambarino.

-Mu-muchas gracias Kaito, de verdad agradezco todo tu apoyo… - miraba hacia el suelo, más que nada para ocultar su rostro ruborizado

-Jajaja, no tienes que agradecer

Eiko lo miró con una dulce sonrisa.

-Te deseo mucha suerte hoy, iré a verte de nuevo – se acercó peligrosamente a la chica, la tomó por la cintura y la abrazó. Eiko simplemente no reaccionaba – Quiero que ganes Eiko, y que seas la primera titular femenina del club de Tenis…

La alejó de él.

Y antes de que Eiko pudiera articular palabra, Kaito ya se encontraba más adelantado que ellos despidiéndose con una gran sonrisa y haciendo señas con una de sus manos.

Eiko estaba helada, nunca la había abrazado tan sorpresivamente. Aunque sólo fue un abrazo, y ella tenía la costumbre de abrazar a medio mundo.

“Supongo que no es nada”

Iba a seguir caminando cuando vio que Ryoma se le adelantaba rápidamente.

“¿Se molestó?”

Prefirió seguirlo sin decir palabra alguna. Él tampoco le hablaba, seguían bajando los escalones que les quedaban, siempre ´le delante de Eiko.

Se encontraban a un piso de llegar al que a ellos les correspondía, el pasillo se veía bastante vacío.

De pronto Eiko sintió cómo Ryoma la empujaba hasta dejarla acorralada en la pared del pasillo.

-¿Ryoma?...

-Yo también quiero que ganes Eiko…

La aludida observó el semblante serio del joven tenista y recordó las palabras de Kaito, ¿por qué Ryoma le decía eso? Si ya se lo había hecho saber cuando estaban en la azotea.

-Ya… lo sé Ryoma – trató de sonreír

Se sentía incómoda en esa situación. Verlo molesto, tampoco podía apartarse porque el muchacho se aseguró al poner ambos brazos a sus costados, y esa mirada penetrante que sólo él poseía, que la enamoraba cada vez más, pero a la vez la intimidaba.

-No te vuelvas a acercar así a él… ni a ningún otro chico

“Ahora entiendo”

-¿De qué hablas? Si fue él quien se acercó así

-Pero tú pudiste haberlo evitado ¿no?

-¿Qué querías que hiciera? ¿Qué lo empujara o algo por el estilo? – habló Eiko sarcástica, pero su novio seguía igual de serio que al principio

-Bueno, entonces si no lo haces tú… me encargaré de hacerlo yo

Ahora si se estaba asustando, Ryoma hablaba enserio. Pero cómo era posible, ¿estaba de verdad celoso? O ¿cómo era posible que en realidad el mismísimo Ryoma Echizen llegara a ser tan posesivo? Aquel que con todos resulta ser un verdadero cubo de hielo.

Pero no le molestaba, eso le demostraba el cariño que le tenía.

Eiko no respondió ante esa última “advertencia” del ambarino, lo miró con una sonrisa. Lo tomó por el cuello, y esta vez fue ella quien se acercó a él para besarlo.

Ryoma lo tomó un poco sorprendido, pero no se negaría, claro que no.

Decidieron que sería mejor seguir con su destino, para evitar que alguien los viera en esa “situación”.


Las clases fueron normales, aburridas como siempre. Cabe decir que una clase de historia en las dos últimas horas no se hace muy entretenida.

Hasta que sonó el tan esperado timbre, y antes de que se dieran cuenta, los integrantes del club de Tenis, alumnos externos y hasta uno que otro profesor, ya se encontraban rodeando la cancha en la que Eiko y Kikumaru residían.

Era impresionante que un partido de Tenis causara tanta conmoción.

“Hay más gente que ayer”

Eiko estaba algo nerviosa. Pero el ver a sus amigos ahí la tranquilizaba, la hacía sentirse más segura de sí misma.

“Tú puedes Eiko” – pensó para sí.

-¡Hay mucha gente! – gritó Tomoka

-¡Incluso más que ayer! – gritó también Horio

-Veamos si el Seigaku logrará tener una titular femenina… - dijo Ryoma – Ganarás Eiko…
End Notes:
Reportandome nuevamente un día Martes ^^ Bueno nada más que decir aparte de que espero que lo disfruten.
Si pueden dejen sus comentarios, me gustaría saber su opinión :3
Graciaaaas
¡Saludos y abrazos!
End Notes:Reportandome nuevamente un día Martes ^^ Bueno nada más que decir aparte de que espero que lo disfruten.
Si pueden dejen sus comentarios, me gustaría saber su opinión :3
Graciaaaas
¡Saludos y abrazos!Regresar al índiceDisclaimer: All publicly recognizable characters and settings are the property of their respective owners. The original characters and plot are the property of the author. No money is being made from this work. No copyright infringement is intended.Esta historia archivada en https://www.fanfic.es/viewstory.php?sid=34669

Eiko Fuji by NairaPeace

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2024-10-24

 

Eiko Fuji by NairaPeace
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