¿Cuánto tiempo llevaba esperando?
Quizás ciento o hasta miles de años habías pasado, incontables vidas y aun no lograba encontrar eso que le hacía falta. Con cada nueva vida era lo mismo, ese enorme vacío se instalaba en su pecho y aun luego de haber muerto no desaparecía. “Ya llegara”… le había dicho su hermano con voz tranquila hace tiempo y que fácil era para el decirlo, de seguro para el ese vacío ni existía en su pecho, suspiro audiblemente y la resignación de una nueva vida sin sentido le invadió el cuerpo.
A lo lejos una mota de cabello rosa muy conocida para él se acercaba corriendo y por primera vez desde que la conocía, vio algo diferente en ella. Tal vez y solo tal vez, esta vida podría tener un poco de sentido, sonrió de lado al pensar aquello.